
Fátima Quintana Gutierrez tenía apenas 12 años de edad cuando tres sujetos la atacaron de forma bestial y cruel.
El 5 de febrero de 2015 la violaron, torturaron y asesinaron. Todo ocurrió por la tarde en la comunidad de Lupita Casas Viejas, Lerma, Estado de México. Hoy se cumplen 5 años de este terrible feminicidio, pero aún después de todo este tiempo Fátima no ha recibido justicia.
Tenía 12 años y estudiaba la secundaria, regresaba de la secundaria cuando los tres hombres la interceptaron. Lorena, su madre la salió a buscar cuando no llegó a la casa. En ese momento vio a Misael Hernandez y le preguntó que si había visto pasar a su hija, porque ella siempre pasaba fuera de su casa ya que era camino obligado. El joven negó haberla visto.
Buscó a la compañera con la que Fátima regresaba después de clase. La niña le dijo que ambas llegaron juntas en el camión y a unos 120 metros de la casa de la menor se separaron, donde siempre lo hacían.

La amiga acompañó a Lorena a buscar en las calles aledañadas y Misael volvió a aparecer. De nueva cuenta le preguntó por su hija, y él lo negó nuevamente. La compañera le dijo que él estaba junto con su hermano Luis Ángel y José N alías El Pelón en el barandal afuera de su casa, por lo que debían haber visto a Fátima.
Asesinato bestial…
Misael, Luis Ángel y José alias El Pelón, la interceptaron en el camino para violarla. Le tiraron todos los dientes, le sacaron un ojo, la picaron cerca de 90 veces, fue violada anal y vaginalmente. Le rompieron las muñecas, le abrieron el pecho y dejaron una herida de 30 centímetros en la entrepierna.
A pesar de toda este pesadilla, Fátima seguía con vida y consciente. Cuando satisficieron sus deseos sexuales, terminaron con su vida aventándole tres piedras en la cabeza, una de ellas de más de 30 kilos, además de que para finalizar su delito intentaron enterrar su cuerpo.
«Encontré a mi hija semi enterrada, solo le alcancé a ver un pedacito de su pie. En un primer momento pensé que se lo habían cortado, y no, era su cuerpo, solo que estaba semi enterrado”, explica la madre.
Pobladores detuvieron y golpearon a los tres acusados del crimen, pero policías los recataron y llevaron al Hospital de Toluca donde estuvieron internados 15 días.
Los asesinos…
Lorena y Jesus, padres de Fátima, persuadidos por las autoridades con la promesa de que la justicia se haría cargo de ellos, les perdonaron la vida a los asesinos de su pequeña y se los entregaron a las autoridades.
Los sujetos permanecieron hospitalizados en calidad de detenidos por algunos días y posteriormente fueron trasladaron al penal para procesarlos por el asesinato. La Juez Penal del Estado de México, Janeth Patiño García sentenció a dos de ellos, los adultos.

A Luis Ángel lo condenó a 73 años de prisión. Mientras que a Misael por ser menor de edad otro juez lo sentenció a sólo 4 años, por lo que este año saldrá libre.
Juan José alias El Pelón se quedó preso esperando sentencia, por lo que hoy se encuentra en proceso.
La familia de Fátima se tuvo que desplazar de su hogar en varias ocasiones debido a las amenazas que recibieron en la lucha por la justicia.
Lorena señaló que jamás se sabrá la razón por la que los tres sujetos asesinaron a su hija, sin embargo, asegura que el crimen es resultado de un sistema patriarcal al que no le importan las mujeres y menos, las niñas.

Letra Roja
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