Joven asesina a puñaladas a su novia, frente a un tío discapacitado

Uncategorized

“Él comió con nosotros, mi hija y él estaban bien, yo jamás vi nada extraño. Se veía muy enamorado de ella. A Martha Karina la veíamos ilusionada”

“Cristian: no sé que te haya hecho mi hija, pero ella no merecía lo que tú le hiciste. Yo lo que quiero es que te entregues, yo sé que con esto nunca vamos a recuperar a mi hija, pero yo sé que pronto te atraparán y Martha Karina tendrá justicia”. Este el mensaje que le envía María Virginia Jorge Ruiz a Cristian Alejandro Ortiz Reyes de 24 años, novio de su hija Martha Karina, hoy prófugo de la justicia.

En entrevista para Excélsior, María Virginia cuenta que el pasado 11 de mayo, Cristian llegó a su casa alrededor de las cinco de la tarde.

“Él comió con nosotros, mi hija y él estaban bien, yo jamás vi nada extraño. Se veía muy enamorado de ella. A Martha Karina la veíamos ilusionada, él era muy atento, educado, eran compañeros de escuela, incluso de salón, en la UACM Cuatepec”.

Aquel día, alrededor de las siete de la noche, María Virginia salió con su hija mayor y su nieto. En casa se quedo Martha Karina, Cristian y su hermano.

“Regresé a las nueve y media y cuando abro la puerta escucho a mi hermano gritar: apuñalaron a Karina. Entré y vi a mi hija tirada en el pasillo, había mucha sangre y corrí a pedir ayuda a los vecinos”

Cristian apuñaló a Martha Karina frente a un tío discapacitado que nada pudo hacer para evitarlo, sin embargo fue testigo de los hechos. Los vecinos llamaron a la Cruz Roja.

“Agarré a mi hija de su cabeza, la tomé en mis brazos y le dije: Kari, vas a estar bien. Luego le dije a mi hermano ‘¿quién fue?’ ‘Fue Cristian’, me dijo”.

Los mensajes del celular de Martha Karina indican que desde el 4 de mayo ella ya no quería continuar en una relación con Cristian, pero él insistió verla por última vez aquel 11 de mayo. El tío, quién a causa de un accidente perdió su capacidad motriz, descansaba en un sillón detrás de la puerta principal. “Cuando escuché gritar a Karina intenté levantarme y con mucho esfuerzo lo hice y vi cuando él la apuñalaba”, dice.

Fueron varias las puñaladas que recibió Martha Karina hechas con un cuchillo de la cocina de María Virginia. Cristian huyó y dejó el arma homicida en el cuarto escalón de las escaleras que dan a la calle, contando de abajo hacia arriba. En minutos, Martha Karina murió. Se ahogó en su propia sangre. Poco después, la madre de Martha Karina recibió una llamada a su celular.

“Él me dijo que era hermano de Cristian y que vivía en Cancún, que me llamaba porque su mamá sabía que Cristian había tenido un problema con Karina y quería saber qué le había hecho su hermano a mi hija y por qué. No sabemos dónde está Cristian, me dijo”.

Aquél 11 de mayo, Martha Karina se despidió de su madre de una manera inusual.

“Antes de irme con mi hija la mayor, Martha Marina me agarró la cabeza con sus dos manos y me dio un beso en la frente -yo le dije- y tú loca ¿porque me besas? Y me dijo; porque cuando tú regreses ya no me vas a encontrar, estaré de fiesta. Cristian, también me dio un beso en la mejilla y le dije: váyanse con cuidado”

Al preguntarle al tío y testigo del apuñalamiento de Martha Karina, él responde:

–¿Fue su novio?

–Sí.

–¿Cómo se llama?

–Cristian

–¿ Tú lo viste?

–Si

“Yo quiero justicia para mi hija, no queremos que dañe a nadie más. A mi hija Martha Karina le gustaba bailar, la música, estudiaba y trabajaba, tenía muchos proyectos y muchas ganas de vivir y salir adelante, es mi hija la segunda, tengo tres mujeres y ella era la única que vivía con nosotros, quiero justicia” puntualiza, María Virginia.

Si usted tiene información de Cristian Alejandro Reyes Ortiz favor de enviar un correo a [email protected]

 

http://www.excelsior.com.mx/comunidad/2013/05/23/900532#.UZ4jN_mSfBw.twitter

Compartir ésta nota:
Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp