El Día de la Independencia de Estados Unidos, celebrado el 4 de julio, conmemora la firma de la declaración que en 1776 formalizó la separación del país del Imperio Británico. Esta fecha, marcada por el patriotismo y el nacionalismo estadounidense, se celebra con desfiles, partidos de béisbol, fuegos artificiales y otros eventos multitudinarios que atraen a miles de personas.
Un Día de la Independencia ensombrecido por la violencia armada
A pesar de las festividades, el 4 de julio también es tristemente conocido por ser uno de los días más violentos del año en términos de tiroteos masivos en Estados Unidos. Según datos de Gun Violence Archive, una organización que registra tiroteos masivos (aquellos en los que hay al menos cuatro personas involucradas), el 4 de julio ha sido el día con más tiroteos en la última década, con un total de 58 incidentes en los últimos 10 años. Le sigue de cerca el 5 de julio.
Estadísticas alarmantes y testimonios desgarradores
En 2023, los tiroteos del Día de la Independencia resultaron en más de una docena de muertos y más de 60 heridos. En 2022, un tiroteo masivo durante un desfile en Chicago dejó siete muertos. La madre de un niño de 10 años que quedó paralítico durante ese ataque comentó que su familia no asistirá al desfile de este año, que se realiza por primera vez desde el tiroteo. “No sé si jamás podré asistir al desfile nuevamente”, dijo Keely Roberts, quien también resultó herida.
Factores que contribuyen a la violencia estival
James Alan Fox, criminólogo y profesor universitario, atribuye estos eventos a factores como las reuniones multitudinarias, el ocio y el consumo de alcohol. Los meses de verano, particularmente junio, julio y agosto, registran el mayor número de tiroteos masivos, en comparación con los meses de invierno, de diciembre a marzo. La violencia suele ocurrir en viviendas privadas y, en muchos casos, las víctimas son familiares o conocidos del perpetrador. La ausencia de clases y el aumento del tiempo libre de los adolescentes durante el verano también contribuyen a incrementar las oportunidades para estos trágicos eventos.
En resumen, aunque el 4 de julio es un día de celebración patriótica, también se ha convertido en una fecha marcada por la violencia armada, destacando la necesidad de abordar el problema de los tiroteos masivos en Estados Unidos.
