Si bien con el paso de los años hemos aprendido a concientizar cada vez más sobre la salud de los perritos y qué condiciones son favorables para su desarrollo, lo cierto es que por ahí quedan varias dudas o ideas que aún no han sido despejadas del todo. Se quedan como mitos de los que por acá les vamos a platicar —en contexto del Día del Perro.
Desde rapar a los perrunos hasta el tema de la esterilización —y contando con el mismo Día Mundial del Perro, orita les explicamos qué onda con esta fecha— estas son algunas ideas que queremos despejar en este texto.
5 mitos sobre los perritos que tienes que conocer en el Día Mundial del Perro
Antes de irnos con los 5 mitos, comencemos con el Día del Perro. ¿Hay una fecha oficial para celebrar y concientizar sobre los perritos?
La verdad es que no. Eso sí, hay algunos países que han programado en sus calendarios las fechas para celebrar a los perritos.
Por ejemplo, cada 21 de julio países como España, Uruguay, Chile, México o Canadá dedican este día a los perritos.
Sin embargo, no se trata de una fecha reconocida por la ONU de manera oficial. Entonces, ¿por qué solemos retomar esta fecha como Día Mundial del Perro? Porque un 21 de julio pero del 2004 la OMS publicó un informe sobre la situación de los lomitos.
En este informe explicó que, en aquellos años, 70% de los perros del mundo no tenían un hogar y muchas capitales mundiales contaban con una alta tasa de animales de la calle.
1. ¿Hay que rapar a los perritos en época de calor?
Ahora sí, empecemos por un mito bien popular: “rapar a los perros en las épocas de calor para que no sufran”.
Lo cierto es que rapar a los perritos no los ayuda en nada. ¿La razón? El pelaje —como en todo animal— tiene una función específica en cada raza de perrunos.
En general, este les ayuda a regular su temperatura y protegerlos de los rayos del Sol, la lluvia y el frío.
Entonces, al raparlos lo que hacemos es exponer su piel a daños y posibles infecciones.
Y va de nuevo: expertos dicen que un perro no pasa menos calor si los rapamos. Lo único que pasará es que se quedará sin protección.
2. ¿Las hembras deben tener por lo menos una camada?
A propósito del Día Mundial del Perro, la UNAM compartió la nota ‘Un mito, las razas agresivas del perro‘, donde con ayuda de la coordinadora de Enseñanza Quirúrgica de la Facultad de Medicina, Veterinaria y Zootecnia Ana Paola Velasco Espinosa nos encontramos ante uno de los mitos más famosones.
“Dejar que las hembras tengan al menos una camada para poder esterilizarlas”.
De acuerdo con Ana Paola Velasco, eso no tiene mucho que ver con la esterilización, además de que esta cirugía disminuye la posibilidad de presentar tumores de glándula mamaria, patologías ováricas como tumores o quistes. Neoplasias o acumulación de líquidos anormales en el útero.
3. ¿La castración produce obesidad en los perritos?
La respuesta es no. La coordinadora de Enseñanza Quirúrgica de la Facultad de Medicina, Veterinaria y Zootecnia de la UNAM explicó que esta idea de que con la castración, los perritos sufrirán de obesidad o cáncer es errónea.
En realidad, en los machos, con la castración se disminuyen los problemas de próstata o los tumores testiculares y la vida de los perritos llega a prolongarse.
Además de que hay beneficios en la conducta, pues al disminuir la cantidad de hormonas que se producen, se ayuda a que el animal sea menos territorial sin importar su raza.
4. ¿Las carriolas son útiles?
Ana Paola Velasco explicó que en situaciones como la tetraparesia —la debilidad muscular en las cuatro patas— y que el perrito no pueda caminar, las carriolas podrían ayudar en sus traslados.
Sin embargo, si este no es el caso y le compramos su carriola a los “perrihijos”, lo que está sucediendo es que estamos formando un vínculo errático, de apego de la persona hacia el animal.
Velasco explicó que tenemos que ser cuidadosos y ante cualquier situación de salud, llevar a los perritos al veterinario para ver de qué manera ayudarlos.
Mas no dañar su libertad conductual y de comportamiento. Dejarlos ser, pues. “Parte de su libertad debe ser el respeto de las conductas propias de su especie; no obstante, el vínculo que hemos creado es tan fuerte que los sobreprotejamos”, concluyó Ana Paola Velasco.
5. ¿Los refugios son la única solución?
Si bien los refugios de animales —michis, perritos y más— buscan atender los problemas de maltrato como abandono y violencia, lo cierto es que no son la única solución.
De hecho, la misma sociedad forma parte de la solución y una manera de participar es informándonos sobre la esterilización, además de su difusión por parte de las instituciones públicas.
El pilón
Y pues sí, el pilón: la UNAM abordó un poco sobre si de verdad existen razas violentas. Y, ¿qué creen?
Ana Paola Velasco Espinosa explicó que si bien hay razas que fueron creadas o destinadas con un fin zootécnico en particular, la verdad es que como humanos nosotros tenemos la posibilidad de detonar las tendencias agresivas.
Además de que la misma UNAM enfatizó que no existen razas que sean agresivas sin el factor humano.
Acá la cita a Ana Paola Velasco: “Son razas que fueron creadas o destinadas con un fin zootecnico en particular sin embargo tenemos la posibilidad de detonar esas tendencias agresivas con lo que estemos creando”.
Otra cosa a considerar es que a la hora de adoptar a un perrito, lo importante es informarnos y estar seguros de que seremos la familia correcta.
Para ello podemos consultar con especialistas, médicos veterinarios o la página de la Federación Canofila Mexicana —cuya información sobre las características fenotípicas, físicas y de carácter de los perritos nos ayudarán a tomar mejores decisiones.
Sopitas