En pasados días han circulado diversas versiones sobre un nuevo escándalo dentro de la administración del ayuntamiento en tiempos de Victoria Labastida. No fueron pocas las voces que durante su administración se alzaron para denunciar el despilfarro de recursos públicos y la poca transparencia con la que se manejaban las arcas municipales.
Ahora, dicen, durante su desastroso paso por el Ayuntamiento de la capital se autorizaron diversas intervenciones quirúrgicas para que empleados y funcionarios municipales, de la pasada administración, se dieran su “manita de gato”. Una muestra más de cómo se le vio la cara a los potosinos, una vez más, con la opacidad y el desvío de recursos de manera innecesaria y oprobiosa.
La nueva administración encabezada por Mario García Valdez se ha encargado de realizar denuncias sobre las irregularidades que han encontrado al revisar las cuentas municipales que entregó, la ausente, Victoria Labastida. Así mismo, Mario García Valdez y funcionarios municipales no han dejado pasar ninguna oportunidad frente a las cámaras para hacer leña del árbol caído y denunciar la corrupción de quien fuera su aliada principal antes y durante la campaña electoral.
No está de más recordar las grabaciones difundidas donde se puede escuchar a un vulgar, y en ese momento todavía Rector de la UASLP, Mario García Valdez confesando tanto su alianza con la señora Labastida para convertirse en candidato del PRI y posteriormente Presidente Municipal como utilizó impúdicamente a la Universidad Autónoma de San Luis Potosí como mera plataforma política.
El Presidente Municipal no debe limitarse sólo a denunciar la corrupción de su antecesora, es su responsabilidad rendirle cuentas a los ciudadanos potosinos y; por supuesto, mantener un seguimiento diario de los avances de las denuncias presentadas. ¿Compromiso con los ciudadanos y ganas de hacer justicia o sólo retórica con miras a la gubernatura?
Jaime Nava
Twitter: @JaimeNavaN