Inversionistas e instituciones bancarias tienen la creencia de que este recurso es la inversión más segura. Las caídas recientes prueban lo contrario
En los últimos días el oro ha tenido uno de sus peores comportamientos en décadas. Empezó desde el viernes pasado con una caída del 5 por ciento en su precio, siguiendo con otra de 9 por ciento el lunes.
Esta ha sido la caída de dos días consecutivos más pronunciada de este metal desde enero de 1980, generando grandes pérdidas para los que apostaban por una subida del oro en este año.
Después de un reporte anual del FMI con previsiones pesimistas para los países de la Eurozona, esta trayectoria del oro es un problema más con el que tienen que lidiar en este momento.
El problema que enfrentan es la pérdida de valor de sus reservas. Ante las fluctuaciones del dólar, algunos bancos centrales comenzaron a invertir en oro para diversificar riesgos y asegurar el valor de sus reservas internacionales.
Ayer Bloomberg reportó que, en conjunto, los bancos centrales alrededor del mundo habían perdido 560 mil millones de dólares por la caída abrupta de la semana.
No sólo los países europeos tienen que preocuparse por esto: en México también se ha invertido fuertemente en oro desde hace dos años.
Aunque a menor escala, en marzo del 2011 el gobernador del Banco de México, Agustín Carstens, anunció que se realizarían inversiones fuertes en oro para que las reservas estuvieran expuestas a menor riesgo.
De febrero a marzo del 2011, Banxico pasó de tener 985 millones de dólares en reservas a 4 mil 638. Ahora esa cifra ronda por los 6 mil 350 millones de dólares. Aunque pueda parecer poco debido a que solo es el 4 por ciento de las reservas, sigue siendo un alto costo.
El buscar la estabilidad en el oro puede ser difícil, debido a que su valor no depende directamente del material, sino también del mercado de derivados alrededor del mismo.
Seguridad sin sustento
A diferencia de otros commodities, el precio del oro no tiene un sustento directo en términos puramente económicos. Mientras que otras materias primas cambian de valor en perspectiva del uso que se le puede dar o en las nuevas tecnologías que cambiarían su demanda, el uso útil del oro es limitado.
Para muchos, una inversión en oro es de las más seguras que existen. Ya sea porque se piensa en un seguro en contra de la inflación o la volatilidad del mercado cambiario, o como una alternativa a rendimientos bajos, el valor del oro ha alcanzado su máximo histórico en años recientes.
Buscando verificar la validez del mito, investigadores de la Universidad de Duke publicaron un estudio en el cual tratan de establecer el grado de seguridad que ofrece el oro en diferentes circunstancias, para los últimos 40 años.
En principio, buscando estudiar el mito de que el oro es la mejor inversión para asegurarse contra la inflación, compararon el crecimiento del precio del oro a través del tiempo, contra la inflación de precios al consumidor en Estados Unidos.
Su conclusión notó que el 42 por ciento del tiempo el oro se encuentra por encima de la inflación, mostrando que la volatilidad que maneja el metal hace muy caro su uso como seguro contra la inflación.
Otro mito existente es que una inversión en oro cubrirá los movimientos volátiles en el mercado cambiario. Aunque esto tenga la apariencia de ser cierto en los últimos 10 años, cuando se traza el estudio desde 1975, y compararlo con el valor del oro en ocho monedas de cierta estabilidad financiera, no se encuentra una diferencia significativa.
De tal modo, las creencias de que el oro es un buen seguro en contra de la volatilidad monetaria o contra la inflación, no tienen un verdadero sustento académico que avale una inversión por tal lado.
¿La mejor alternativa?
Hay muchos gurús de las finanzas que creen que una inversión en oro, más que una fuente de seguridad, es la mejor alternativa contra una inversión de bajos rendimientos.
Mientras que la aseveración parece ordinaria, al ponerle la lupa académica se encuentra que la relación entre la tasa de interés nominal y el rendimiento del oro aparenta una correlación engañosa.
Tanto se puede argumentar que una tasa de interés baja puede causar una alza en el precio del oro, como la posibilidad que ambos factores sean causados por una fuerza externa, como el miedo a la hiperinflación.
Finalmente, la creencia de que el oro es la mejor inversión en tiempos de crisis, también ha sido estudiado para encontrar la realidad de su argumento.
Al analizar el rendimiento mensual del S&P 500, contra el rendimiento del oro en ese mes en particular, se encuentra una conclusión evidente. Si el oro fuera una buena inversión en tiempos de crisis, cuando el rendimiento del S&P 500 sea negativo, el precio del oro tendría un rendimiento positivo o cercano a cero.
El estudio muestra que el 17 por ciento de las observaciones en los últimos 40 años han mostrado tanto un rendimiento negativo del oro, como del mercado en general, rompiendo con el mito de la seguridad ante la crisis.
Glosario
Pasivo Circulante
Valor que representa las obligaciones contraídas por la empresa que serán liquidadas dentro del plazo de un año a contar de la fecha de la emisión de los estados financieros de la empresa.