“Hay una gran ignorancia de los políticos porque pareciera que piensan que el agua viene de los tubos y las presas”, ironizó el investigador de El Colegio de San Luis, Francisco Peña, al señalar también que los candidatos no han mostrado propuestas al problema del agua.
El coordinador del programa Agua y Sociedad de la citada institución de estudios superiores, lamentó que a pesar de ser un tema esencial en la vida de los potosinos el tema de agua, está ausente de la agenda electoral de los aspirantes a puestos de elección popular, en particular de quienes aspiran a ser presidentes municipales.
Calificó de “muy grave” esa ausencia de propuestas para resolver de fondo un problema tan generalizado en el estado, no sólo en las ciudades, sino también en la zona rural. Dijo que el agua la dan ecosistemas sanos y no porque haya más presas y tubos, va a llover.
Consideró que también hay desidia entre la clase política y sólo consideran el tema del agua por su rentabilidad electoral y como una manera de hacer negocios. “Poner tubos y hacer presas son obras caras y dejan grandes márgenes para la corrupción y para las ganancias”, dijo el investigador.
Sobre la llamada Caravana del Agua que estará en San Luis Potosí el próximo martes 19 de mayo, dijo que su principal objetivo es mostrar como un espejo, los principales problemas del agua que se enfrentan en diversas regiones del país.
Precisó que desde el 11 de mayo inició el recorrido de cuatro contingentes hacia la ciudad de México, que pretenden hacer un llamado a la ciudadanía sobre los graves problemas de agua. Los otros grupos salieron, uno de Chiapas, y dos más de Coahuila y Chihuahua, éstos últimos habrán de coincidir en territorio potosino, para continuar juntos su marcha a la capital del país.
Refirió que los problemas que menciona la Caravana, son problemas de casi todos los pueblos que van a visitar, como en San Luis el problema del abasto de agua a colonias populares a pesar del funcionamiento de la presa El Realito, “siguen las colonias del norte sin abasto regular de agua, y con ello, una ausencia total de su derecho humano al agua”.
Fuente: La Razón