El dueño de los Patriotas de Nueva Inglaterra, Robert Kraft, dijo que el equipo no apelará la multa de un millón de dólares y la pérdida de dos selecciones del draft que la NFL le impuso por utilizar balones desinflados en el partido por el campeonato de la AFC.
Kraft dijo el martes en la reunión de dueños de equipos que coloca los intereses de la liga antes que los de su equipo porque “en ningún momento los intereses de un equipo deben ir por encima del bien general de los 32”.
Los Patriotas perdieron un turno de primera ronda en el draft del próximo año, y otro de cuarta ronda en 2017.
“Cuando se anunció el castigo, me pareció que era exagerado”, dijo Kraft, y agregó que si hubiese tomado la decisión la semana pasada, probablemente sería distinta.
Pero, después de pensarlo mejor, dijo que decisión no apelar por su “creencia en la fortaleza de la sociedad de la (NFL) y de los 32 equipos”.
Kraft también reconoció los poderes que los dueños otorgaron al comisionado Roger Goodell.
“Tengo que respetar al comisionado y creo que él hace lo que le parece que es lo correcto por el bien de los 32 equipos”, agregó Kraft.
El quarterback Tom Brady fue suspendido por los cuatro primeros partidos de la temporada de 2015, y la decisión de Kraft no tiene nada que ver con la apelación del castigo de Brady, que el quarterback presentó a través del sindicato de jugadores.
Kraft no respondió preguntas sobre su decisión ni sobre la apelación de Brady.
Con información de: Milenio
