La evaluación al desempeño docente del magisterio no es una novedad de la reforma educativa, sino los efectos que se pretenden dar a los resultados. A decir de quienes critican la reforma, la valoración de los maestros puede convertirse en un mero instrumento para facilitar el despido profesores y hacerse del control del gremio.
El sector educativo cuenta, desde hace algún tiempo, con departamentos de investigación al desempeño docente dentro de las direcciones de investigación educativa, evaluación y gestión de la calidad, que realizan anualmente valoraciones de los profesores, basados en un sistema de puntajes según la categoría de cada maestro.
El desalentador panorama de los resultados de esas evaluaciones no es desconocido para quienes toman las decisiones dentro del sector educativo, en tanto que hasta ahora para los evaluados la finalidad de esas ponderaciones resulta un misterio.
Si bien es cierto que lo que no se mide no se puede mejorar, para los profesores saberse evaluados no ha tenido ese sentido porque en ningún momento se les ha invitado a sumarse a acciones de capacitación o de otra naturaleza que pudieran ayudarlos a mejorar su desempeño.
Por lo menos así queda de manifiesto en la Benemérita y Centenaria Normal del Estado (Becene), desde donde ayer surgió un documento entregado en la oficina del secretario de Educación del Gobierno del Estado, en el que se exponen los resultados de la más reciente evaluación a los profesores de ese plantel.
“¿Cuántos de los docentes con calificación reprobatoria se encuentran actualmente recibiendo la capacitación correspondiente para poder obtener los puntos necesarios para su aprobación?”, pregunta la maestra Sonia Vargas Almazán, catedrática en la Becene que firma el documento, quien solicita la intervención del titular de la SEGE.
Al documento acompaña los resultados oficiales de la evaluación identificada como BECENE-DEDD-PO-01-05 Rev. 4, en los que 81 profesores aparecen reprobados y sólo 53 aprobados. Entre quienes obtienen las calificaciones más bajas se encuentran los profesores de tiempo completo, de quienes sólo aprobaron 18 y 36, el doble, salieron reprobados.
De los profesores de tres cuartos de tiempo, cuatro aprobaron y 18 reprobaron; de los de medio tiempo aprobaron 13 y reprobaron 11, en tanto que de quienes trabajan por hora-clase 18 aprobaron y 16 resultaron reprobados.
Los resultados de las evaluaciones tienen fecha del 12 de marzo. Han pasado más de 50 días y ninguno de los profesores evaluados ha recibido aviso alguno para someterse a algún programa de apoyo para mejorar su desempeño.
En la Becene los profesores evaluados son quienes preparan a los futuros profesores que estarán ante las aulas de las escuelas de todo el estado, e incluso de otras partes del país, lo que convierte las cifras de las evaluaciones sobre las que se pide la intervención de la SEGE en un indicador grave de lo que pasa en materia educativa.
Si en el ámbito en el que se prepara a los futuros maestros existen esos niveles de desempeño sin medidas para corregirlos, ¿qué se puede esperar a nivel de educación básica? ¿Dónde y quiénes han dejado de hacer la tarea?
Luego de dar a conocer los resultados de la consulta que realizaron el pasado jueves, integrantes de cinco agrupaciones ciudadanas encabezadas por Ciudadanos Observando emplazaron a los diputados locales a asumir el compromiso de tomar en cuenta lo manifestado por las mil 753 personas que acudieron a las dos urnas que instalaron en la plaza de Armas.
Los integrantes del actual Congreso estatal tienen en la manifestación de rechazo total a los ingresos que perciben la decisión más difícil, luego de que desde el principio se asumieron como Legislatura barata.
“Si se toma positivamente esta opinión, por parte de todos los involucrados, en verdad se podrán acercar a la gente como sus representados, de lo contrario se seguirá abriendo esa brecha y generando mayor desilusión entre la ciudadanía”, advirtieron los organizadores de la consulta.
No es la primera vez que se llama al orden a los legisladores. Durante la anterior Legislatura, la barra potosina de abogados envió un código de ética para que los diputados se comprometieran a actual con moderación en lo salarial y atención a sus representados, con una respuesta mínima.
El ejercicio hoy realizado por estas cinco agrupaciones civiles es una señal de que desde la ciudadanía organizada se intenta modificar la relación entre representantes y representados, en un juego de estira y afloja en el que los primeros tienen la ventaja de hacer como que los atienden en tanto se acaba su periodo, y que después las ciudadanos se entiendan con los que lleguen.
De no obtener resultados, no sólo se abriría la brecha entre ciudadanos y representantes, sino que quedaría de manifiesto que de la parte ciudadana urgen nuevas estrategias para lograr un cambio efectivo.
Forbes México ha ubicado a San Luis Potosí entre las tres mejores ciudades para vivir, presumen hoy las autoridades locales. Se trata de un texto firmado por Sandra Hendrix, directora de Operaciones en Coldwell Banker México, en su calidad de colaboradora de la revista y no de un estudio necesariamente avalado por la publicación.
El ranking del texto de Forbes México contrasta con lo publicado en el sitio Web de Coldwell Banker México, donde aparece un artículo titulado “Los mejores lugares para vivir”, en el que se mencionan siete ciudades y cinco playas. No aparece León ni tampoco San Luis Potosí, sólo Mérida.
El sitio web presenta ofertas de distintos tipos de inmuebles en todo el país. De las tres ciudades mencionadas por Hendrix en Forbes México, de Mérida se ofrecen 128 inmuebles, de León 43, y de San Luis Potosí sólo uno, que es una oficina ubicada en avenida Carranza esquina con Valentín Gama.
Las razones de la publicación en Forbes México no quedan del todo claras, por lo que lo más prudente, antes que elevar las campanas al vuelo, sería mejor echar un vistazo a otros indicadores que, más realistas, resultan de mayor utilidad para orientar las acciones de gobierno y no las promociones de imagen.
Tras las erráticas declaraciones y aclaraciones en torno a lo ocurrido en el Penal de La Pila, no es de extrañar que entre los custodios del reclusorio exista tanto temor a una posibles generación de chivos expiatorios, pues pareciera que no se busca quién la permitió, sino quién la habrá de pagar, lo que incluye dejar a un lado medidas para prevenir otra.
La Jornada San Luis]]>