Si son de los que creen que vivimos en un mundo cada vez más incluyente y sin prejuicios, lo que le pasó a Tahera Ahmad es una buena dosis de realidad.
El pasado viernes, la capellán y directora de compromiso interreligioso en la Universidad Northwestern viajaba a bordo de un vuelo de la empresa United Airlines con rumbo a Chicago… como cualquier persona, desconfía de la higiene que se suele manejar en cuanto al manejo de alimentos y por ello al tener sed pidió a la aeromoza una lata de refresco sin abrir… sin embargo, la respuesta de la empleada la dejó sin palabras.
“NO ESTAMOS AUTORIZADOS A DARLE LATAS SIN ABRIR A LA GENTE PORQUE PUEDEN UTILIZARLA COMO ARMA EN UN AVIÓN”.
Ahmad, quien utilizaba un hiyab (pañuelo con el que las mujeres musulmanas cubren su cabello y también su cuello) detectó la discriminación de la que era víctima, ya que a un hombre que estaba sentado cerca de ella se le había dado una lata de cerveza… indignada y esperando algo de apoyo, preguntó a los pasajeros si veían lo que estaba ocurriendo…
Sin embargo, la indiferencia de la gente fue quizás igual de dolorosa que la respuesta de un hombre que estaba sentado del otro lado del pasillo, quien le gritó: “¡Tú, musulmana, necesitas callarte!”…“¿Qué?”, preguntó la mujer de 31 años… “¡Sí, sabes que la utilizarás como un arma, así que cállate!”, le reafirmó el sujeto, acercándose y viéndola directo a los ojos.
Mientras todavía volaba, Ahmad narró lo ocurrido a través de su cuenta de Facebook.
Aunque la gente que pudo hacer algo para defenderla sólo atinó a mover la cabeza en gesto de desaprobación, en las redes sociales el apoyo se hizo más “evidente”, mediante el ashtag #unitedfortahera.
En respuesta a las críticas, el vocero de United Airlines, Charles Hobart, aseguró que la empresa apoya la diversidad y la inclusión, por lo que estaban tratando de localizar a Ahmad para “entender mejor lo que había ocurrido”.
Respecto a la convocatoria que se ha hecho por las redes para realizar un boicot contra United Airlines, Ahmad comentó en su post que la intención de dar a conocer el trato que se le dio –aun siendo cliente asidua de clase premier- no fue con la intención de perjudicar a la empresa:
“Esto es sobre la intolerancia y el racismo; nuestro país está pasando por un momento muy difícil ahora mismo. El doctor Martin Luther King Jr. y muchos otros trabajaron muy duro (…) Ellos lucharon mucho para que los estadounidenses no nos maltratáramos unos a otros por cuestiones de color, piel, religión o etnia, pero creo que seguimos en ese camino”.
Fuente: Sopitas