– Los ladrones saquearon una joyería ubicada en plena zona centro, y obtuvieron un botín que supera el millón de pesos. Para ingresar hicieron un boquete en una de las paredes.
Desde las 20:00 horas del viernes la joyería Rubí cerró sus puertas al público, y el sábado a eso de las 10:30 de la mañana, la propietaria de nombre Viridiana R., llegó al establecimiento para abrir e iniciar labores.
Sin embargo al ingresar se llevó una desagradable sorpresa, ya que la mayoría de los aparadores estaban vacíos, y había un hueco de aproximadamente medio metro de diámetro en una pared.
Presumiblemente el latrocinio sucedió en el transcurso de la madrugada, los ladrones primero violentaron el candado del portón que resguarda un pasillo contiguo a la joyería, y el cual colinda con el establecimiento denominado InverCap Afore.
Ingresaron al pasillo que mide alrededor de 30 centímetros de ancho por tres metros de fondo, y volvieron a cerrar el portón para que nadie los viera, y así tranquilamente rompieron probablemente con herramienta especial, la pared de la joyería, la cual estaba construida de piedra laja (difícil de romper).
Luego de darse cuenta del robo, la afectada pidió auxilio al Sistema de Emergencias 066, y enseguida llegaron policías de diferentes corporaciones, para iniciar las investigaciones.
Sin embargo hasta el cierre de la edición, lo único que se sabía era que el monto del atraco ascendía a más de un millón de pesos, y de los maleantes no había pistas.
Fuente: Pulso
