La aprobación a la gestión del presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, cayó en mayo tras cuatro meses al alza, para ubicarse en 25.8 por ciento, de acuerdo a una encuesta de la firma local Datanálisis.
Maduro, un ex chofer de autobús de 52 años de e dad, enfrenta un difícil panorama con una recesión económica, escasez de productos básicos y la inflación más alta de América en medio de millonarios pagos de deuda externa durante todo el 2015.
A fines del año pasado, la aprobación del presidente fallecido Hugo Chávez tocó un mínimo de 22.8 por ciento. Sin embargo, a partir de allí repuntó hasta 28.2 por ciento en marzo.
Según el sondeo, realizado entre el 18 y el 30 de mayo con un nivel de confianza de 95 por ciento, un 68.8 por ciento de la población desaprueba su gestión y ocho de cada 10 consultados creen que la situación del país es “negativa”.
La baja aprobación de Maduro no es extraña en América Latina. Dilma Rousseff en Brasil y Ollanta Humala en Perú tienen índices aún menores. Sin embargo, durante sus 14 años de gobierno socialista, Chávez puso la vara muy alta en términos de popularidad en la polarizada Venezuela.
Desde que asumió como presidente del país petrolero dos años atrás, la popularidad de Maduro ha perdido terreno a medida que la crisis económica se acrecienta con el desplome de los pecios del petróleo, fuente del 90 por ciento de sus ingresos.
Maduro atribuye los problemas económicos a la oposición política que, según sostiene el mandatario, cuenta con apoyo de Washington para sembrar el caos y derrocarlo. Esas acusaciones han sido negadas.
Por otro lado, la encuesta de Datanálisis coloca al apresado Leopoldo López como el líder opositor con mayor aceptación, con 40.1 por ciento, seguido de cerca del dos veces candidato presidencial Henrique Capriles, con 37.5 por ciento.
Según la encuesta, el oficialismo perdería la mayoría que ostenta en la Asamblea Nacional en las elecciones de fin de año al sólo alcanzar el 21.3 por ciento de los votos, frente al 40.1 de la oposición.
Fuente: La Jornada.
