La tabla funcionaba como un submarino a control remoto que transportaba droga sintética desde Tijuana hasta territorio estadunidense, ascendiendo el botín hallado a unos cien mil dólares.
Un grupo de narcotraficantes se las ingenió para convertir una tabla de surf en un submarino a control remoto para transportar droga sintética desde la mexicana Tijuana (noroeste) hasta territorio estadunidense, informaron autoridades locales que hallaron dentro del artefacto un botín estimado en cien mil dólares.
El miércoles, pobladores que paseaban por la playa “encontraron la extraña tabla a la orilla del mar”, por lo que un grupo de policías acudió para inspeccionar el objeto, informó la secretaría de Seguridad Pública de Tijuana, que colinda con la estadunidense San Diego (California). La tabla de fibra de vidrio, de tres metros de largo por 90 centímetros de ancho, se encontraba a unos dos kilómetros de la frontera.
Al escudriñarla, los agentes se percataron que “tenía un doble fondo, así como un mecanismo de propulsión hecho con un tubo metálico que sostenía una pequeña hélice. Ambos conectados con cables a unas baterías”, explicó Seguridad Pública.
Una vez abierta la tabla, los policías descubrieron 22 recipientes de plástico con tapas de distintos colores que “contenían 20 libras de droga sintética cristal, valuada en al menos cien mil dólares”, añadió la institución.
Los agentes estiman que el agua se filtró en el compartimiento y averió el dispositivo manipulado a control remoto, por lo que el artefacto quedó a la deriva y fue arrastrado por la corriente. Además del cártel de Tijuana, la estratégica región es disputada por otras organizaciones criminales como la de los Arellano Félix y el cártel de Sinaloa.
Con frecuencia, las autoridades descubren diversas y creativas estrategias para trasladar la droga a Estados Unidos, primer consumidor mundial de narcóticos, entre ellas túneles cavados a punta de pico y pala. A principios de año, muy cerca de la garita fronteriza de San Ysidro, cayó un vehículo aéreo no tripulado con cajas que contenían droga sintética.
El fin de semana pasado, se decomisaron en Tijuana 41.6 toneladas de mariguana que estaban escondidas en el sótano de una bodega detrás de una casa, en una de las mayores confiscaciones de cannabis en el país.
Fuente: Milenio