Buscan prohibir bailes eróticos entre menores en Colombia

Uncategorized

Tratan de evitar movimientos que “incidan en el contacto físico de tipo sexual y que hagan apología al sexo”.

El puerto colombiano de Cartagena de Indias estudia un proyecto para prohibir a menores de edad que realicen bailes eróticos en sitios públicos.

El concejal Antonio Salim explicó que la iniciativa “lo que busca es establecer unas normas para prevenir la participación de menores de edad en bailes que incidan en el contacto físico de tipo sexual y que hagan apología al sexo”.

En entrevista telefónica con The Associated Press, Salim indicó que el proyecto ya superó dos audiencias públicas y se ultiman los detalles para que se ajuste a la ley y la constitución en el caso de ser aprobado en el concejo de este puerto sobre el Caribe.

Las danzas eróticas, dijo Salim, han disparado en la ciudad el inicio temprano de los menores en la vida sexual y los embarazos no deseados que el año pasado fueron cerca de 4,000.

Pero para Manuel Reyes, experto en ritmos autóctonos de la costa Caribe, la iniciativa es equivocada porque una cosa son los bailes sensuales y otra los eróticos.

Enfatizó que los habitantes de Cartagena llevan en su sangre orígenes africanos “y como tal la mayoría de bailes afro son sensuales mas no eróticos”. Hace más de un siglo, recordó, el mapalé fue prohibido precisamente por sus movimientos sensuales.

Para Reyes la iniciativa “es una alharaca” porque esas danzas son ancestrales “Entonces que prohíban todos los bailes”, ironizó.

En Cartagena los bailes populares forman parte de la cultura de la ciudad. El picó es una de sus principales manifestaciones y ocurre por lo general los fines de semana. En la plaza de toros pueden llegar a reunirse más de 5,000 personas que al son de la champeta, una mezcla de ritmos africanos, bailan de manera sensual, provocativa y cercana.

Para el gestor cultural Aroldo Mondon “es la primera tarima de un cantante”.

Pero los picós han sido considerados en algunas ocasiones generadores de violencia, lo que ha llevado a la alcaldía de la ciudad a reglamentarlos.

Analistas consultados por AP dijeron que si el proyecto es aprobado en Cartagena es muy posible que, a través de una tutela o recurso de amparo, pueda ser revisado por la Corte Constitucional.

Según el jurista José Gregorio Hernández, quien fue magistrado de la Corte entre 1992 y 2001, hay nutrida jurisprudencia de ese tribunal que sostiene que “ese tipo de prohibiciones son completamente contrarias a la libertad y lesionan no sólo el libre desarrollo de la personalidad sino que afectan la dignidad misma de las personas”.

Hernández recordó que esas diversiones son típicas de ciertas regiones del país. Las comunidades indígenas, por ejemplo, tienen sus propios bailes y celebraciones. “Eso tiene que ser respetado… Además que hay que respetar las manifestaciones de la juventud”.

Finalmente observó que ese tipo de prohibiciones se prestan para la censura y la arbitrariedad. “El tango y el mapalé son bailes eróticos, ¿Entonces los van a prohibir”, se preguntó.

Fuente: El Nuevo día

Compartir ésta nota:
Facebook
Twitter
LinkedIn
WhatsApp