Las nuevas consolas tienen numerosos videojuegos disponibles, pero si uno quiere volver a jugar a algún título antiguo se encontrará con que ya no es posible. Existen alternativas para resolver el problema, pero requieren ciertos trucos.
Ni la Playstation 4 de Sony ni la Xbox One de Microsoft pueden reproducir los juegos de sus antecesoras. Solamente la Wii U de Nintendo permite utilizar algunos de los juegos creados para la Wii original.
El experto Rüdiger Kopp subraya que la incompatibilidad es sobre todo una cuestión de costos. Para que los juegos de la Playstation 3 también se vean en la máquina de la siguiente generación, es necesario que el aparato lleve incorporada su tecnología. Y años después del lanzamiento inicial esto es sumamente caro. Algunas de las opciones posibles son:
COMPRAR CONSOLAS VIEJAS
Para quien tenga espacio suficiente en casa es relativamente sencillo encontrar antiguas consolas por Internet o en los mercadillos de aparatos usados. Modelos como la SuperNintendo y la Playstation 1 se pueden comprar a buen precio, con los juegos incluidos. Más caras son las opciones ya “exóticas” como la Atari Jaguar o la Panasonics 3DO.
La conexión con el televisor LCD puede ser un problema, explica Kopp, porque las consolas antiguas llevan otras conexiones. Por eso, los fans de los clásicos necesitan adquirir también adaptadores para entradas HDMI y deberían desactivar las opciones para mejorar la calidad de la imagen.
NUEVA TECNOLOGÍA PARA JUEGOS VIEJOS
Existen consolas “todo en uno” como la Retron 5 que tienen varios enchufes para los aparatos de NES, Super Nintendo, Sega Mega Drive y otros que se pueden jugar así con sus controles originales. Pero, no todos los títulos funcionan igual de bien, algo que subraya el propio fabricante Hyperkin.
La Wii U y las consolas más nuevas de Sony permiten bajarse algunos clásicos de Internet y jugarlos en el aparato nuevo. Los precios no son excesivos, varían según juego y consola entre 5 y 15 euros (o dólares). Con el servicio de Sony Playstation Now (no disponible en todos los países) se pueden jugar los antiguos títulos sin necesidad de su descarga.
EMULADORES
Para la PC y minicomputadoras como la Raspberry Pi, hay numerosos programas que permiten ejecutar videojuegos en una plataforma distinta de aquella para la que fueron creados. A ello hay que sumar adaptadores USB para poder usar también los antiguos mandos. Pero, legalmente el papel de los emuladores es complejo.
En sí mismos no son ilegales, pero el portal jurídico “iRights.info” subraya que hay “un ámbito muy limitado para su uso”. En concreto, sólo es legal usar los emuladores si uno tiene los juegos originales en la PC y crea prácticamente una copia de seguridad.
Si los juegos se bajan directamente de la red, esto se considera ilegal, pese a que la comunidad en torno a los emuladores diga a menudo lo contrario. De hecho, los grandes fabricantes no lo consideran legal. Nintendo, por ejemplo, prohíbe explícitamente los emuladores para sus juegos.
ELEGANTES NUEVAS EDICIONES
A más tardar con el lanzamiento de la Playstation 4 y la Xbox One existen ediciones especiales de videojuegos más antiguos, aunque se trata de títulos no muy viejos. Los relanzamientos, por ejemplo de “Tomb Raider”, “Devil May Cry” o “The Last of Us”, adaptados a las nuevas consolas aparecieron uno o dos años después del original y son bastante caros: cuestan entre 45 y 65 dólares.
“Mejoran un poco los gráficos y se añade a veces el contenido que antes se debía descargar de Internet pagando aparte”, explica Rüdiger Kopp. “Comprarlos tiene sentido sólo para los jugadores que no conocen el original”.
DEFINIR UN CUARTO DE JUEGOS
Los auténticos fans de lo clásico pueden comprarse incluso las máquinas que hacían furor en los años 80, que siguen siendo muy divertidas en muchos casos. “Los gráficos eran mejores de lo que se vio luego en las computadoras más modernas”, afirma Andreas Lange, director del Museo de Videojuegos de Berlín. Sin olvidar los mandos especiales, las pistolas o los volantes para los juegos de carreras.
El precio oscila en este caso entre los 650 y los 2200 dólares, a lo que se suma el transporte y el mantenimiento. “Muchas máquinas usan monitores de tubos catódicos”, añade. “Y es muy difícil repararlos o sustituirlos”.
Sin embargo, si se tienen conocimientos suficientes, es posible montar las máquinas antiguas con los monitores modernos y con ayuda de emuladores incluso jugar variosjuegos en un mismo aparato.
Con información de: Men’s Health