Hornos ecológicos languidecen entre la maleza; los otros siguen funcionando.
En abandono y rodeados de maleza se encuentran los tres hornos que gobierno estatal construyó para hacer menos contaminante el proceso de fabricación de ladrillos y reordenar la actividad.
Según el proyecto, en una primera etapa, 30 familias de los 180 propietarios de ladrilleras, se podrían mudar a trabajar a estos nuevos hornos, los cuales están ubicados a casi 4.5 kilómetros del libramiento norte hacia Peñasco.
Son tres hornos con seis sistemas (es decir, doble bóveda), con mayor eficiencia de combustión, que para la fabricación del ladrillo usan un material menos contaminante que el actual, explicó el Secretario de Ecología y Gestión Ambiental, Sergio Cruz Oviedo.
“Con esto garantizamos la migración de al menos 30 familias que estarían fabricando sus hornos en un área controlada, supervisada, que estaría mejorando la salida del aire al disminuir las emisiones por cambiar el combustible, el que actualmente se utiliza se obtiene de cualquier tipo de residuos como llantas, electrodomésticos, ropa y algunos de uso industrial”, dijo.
Para el caso del ayuntamiento capitalino, lo que corresponde a Ecología es el uso de suelo, y verificar que residuos domiciliarios no se quemen en dichos hornos, a lo que el titular, Alejandro Leal Espinosa dijo que todavía existen lagunas legales para normar este tipo de producción, “las emisiones a la atmósfera de procesos productivos corresponden a Segam”, dijo.
Fuente: Pulso
