Luego de que además de los matrimonios igualitarios ahora la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) habría avalado la adopción de niños por parte de parejas del mismo sexo, el vocero del arzobispado de San Luis Potosí, Juan Jesús Priego Rivera comentó que no hay de qué preocuparse, ya que la Iglesia Católica no armará ninguna “revolución” y aunque no puede estar de acuerdo con estas disposiciones, las aceptará en paz.
El vocero precisó de igual forma que la opinión de la Iglesia seguirá siendo la de estar en contra de la adopción de niños por parte de parejas del mismo sexo, pero la Iglesia nunca va a rechazar a nadie por su orientación sexual, pero también tiene sus principios “pero es difícil que se vaya a encabezar una especie de revolución”.
El clérigo comentó de igual forma que todos en una sociedad democrática tienen el derecho de manifestarse y dar a conocer su punto de vista y su concepción de la vida, las personas que participaron en las movilizaciones del pasado fin de semana están en todo su derecho y de igual forma se les tiene que respetar.
Finalmente aseveró “la homosexualidad sigue siendo un misterio sin explicación” ya que ninguna teoría científica es concluyente, pero mientras esto siga siendo así, la Iglesia seguirá recibiendo y acogiendo con afecto a los homosexuales.
“Yo no me mando solo”
Por otro lado, cuestionado al respecto de las declaraciones del arzobispo de San Luis Potosí, Jesús Carlos Cabrero Romero en el sentido de que “se le habría ido el pico” al comentar que las víctimas de pederastia clerical ya no tendrían derecho a reclamar después de 30 años, Priego Rivera respondió “yo no me mando solo”.
Especificó que cuando recibió el encargo de la vocería lo hizo con mucho gusto “somos personas y nos podemos equivocar, nadie tiene el monopolio de la seguridad, en los periódicos pueden editar la información y yo no tengo esa oportunidad, en este sentido ya pedí a quienes debí pedir disculpas”.
Por último comentó que platicó del caso personalmente con el arzobispo quién le respondió que estaría consultando con su equipo de asesores la continuidad de él, al frente de la vocería de la arquidiócesis “y yo estoy a lo que el arzobispo disponga y si me dice que tengo que ser relevado lo acataré con la misma alegría con la que acepté el encargo”.
Fuente: La Jornada