Aunque Michoacán es uno de los estados en que la violencia se presenta con regularidad, la población parece que todavía establece límites.
Tras conocerse la muerte de Jorge L., un joven de 24 años que poco antes había sido detenido por policías de Tangancícuaro, Michoacán, pobladores atacaron la alcaldía, responsabilizando a los agentes por este fallecimiento. Según reporta Reforma, la noche del sábado el sujeto había sido arrestado por supuestamente alterar el orden público. Pero fue al día siguiente que su cuerpo fue encontrado sin vida, colgado del cuello con un cinturón, dentro de la celda donde se encontraba en la llamada Barandilla.
En protesta por lo anterior, una turba apedreó las instalaciones de la alcaldía de Tangancícuaro, localidad ubicada aproximadamente a 133 kilómetros de la capital del estado, Morelia. Además de lanzar objetos contra el inmueble oficial, también se prendió fuego a una patrulla; las llamas alcanzaron el techo del Palacio Municipal y también un local comercial ubicado a un costado.
Para contener a las decenas de personas que participaron en la protesta fue necesaria la intervención de diferentes corporaciones policiacas, cuyos reportes indican que los disturbios fueron incitados por familiares del fallecido al poco tiempo de finalizado su entierro.
Al respecto de la muerte de Jorge L., la Procuraduría General de Justicia en el Estado (PGJE) indica que según los primeros peritajes, éste se habría suicidado, pero a falta de más pruebas, aún no se confirma la información.
Durante la protesta de ayer por la noche, los participantes gritaron consignas contra la presidenta municipal. Se habla de al menos cinco personas detenidas, así como de cinco agentes lesionados. Sin embargo se está a la espera de un reporte oficial que confirme toda la información.
Con información de: Excélsior