Se tomó una botella completa de Coñac porque no la podía meter al avión

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Una mujer en un aeropuerto en Beijing se tomó una botella de coñac de 180 dólares porque le dijeron que no podía pasar por el arco de seguridad y —escena borrada— después la encontraron arrastrándose y gritando en el piso del vestíbulo. Después, el personal del aeropuerto decidió no dejar que se subiera al avión. Pero lo que nadie ha dicho es que estaba ebria.

Cuando esta mujer —de cuarenta y tantos años de edad a quien conocemos solo por su apellido, “Zhao”— llegó al Aeropuerto Internacional de Beijing poco antes de su vuelo hacia Wenzhou, el personal de seguridad la detuvo y le informó que no podía ingresar al avión con su botella Rémy Martin XO Excellence de 180 dólares en su bolso de mano, según el periódico The Nanfang. Entonces hizo lo único que se puede hacer en esa situación: les pintó pito, se fue a un rincón y se bebió toda la botella ella sola.

Estas son citas selectas del recuento del caos publicado en Nanfang:

“Zhao empezó a comportarse como loca y a gritar de forma incoherente”.
“Debido a su grado de ebriedad, cuando Zhao cayó al piso, no pudo volver a levantarse”.

“Esto generó otro problema de seguridad: la botella de coñac ahora estaba en su interior”.
“Zhao fue trasladada a una habitación para convalecer y para que la revisara un doctor”.

Más tarde, tanto el piloto como la policía (la información varía) decidieron que, lógicamente, Zhao no estaba en condiciones de volar y la detuvieron en una habitación para convalecer hasta las 7PM, cuando se recuperó. Sí, es mucho mejor que tu anécdota de “Nos echamos seis tarros en el aeropuerto antes de nuestro vuelo hacia Jamaica” durante tus vacaciones de verano, ¿o no? La señora Zhao mandó a la chingada al sistema con todo y sus reglas y sus medidas de seguridad y sus restricciones de líquidos. Zhao enfrentó a la policía y le dijo “Métetelo por el culo”. La señora Zhao, una china ebria de cuarenta y tantos años de edad, es probablemente la más punk de todos los punks.

Muchos me dicen: “Joel, cuéntanos sobre la vez que el guardia de seguridad polaco te obligó a tirar una botella de vodka”. Pues bien, querido lector: una vez, un guardia de seguridad polaco súper estricto, vestido con un uniforme militar, que era el encargado de la documentación, me obligó a tirar una botella de vodka. Y yo, como el niñito llorón que soy, le obedecí. Me quedé viendo fijamente sus ojos azules duros y sin alma, y tiré la botellita de vodka que quería llevarme a casa al bote de basura especial para vodka. ¿Que si estoy avergonzado? Sí, lo he estado desde ese momento. Y todo porque no tuve ni una fracción del valor que tuvo la señora Zhao.

Todo el tiempo escuchamos historias de los raperos son su coñac. Disfrutan su brandy súper caro de la región francesa de —esperen, tengo que googlearlo— de la región francesa de Cognac. Pero 50 Cent nunca se ha tomado una botella completa de coñac —en un aeropuerto, en menos de una hora— ni ha terminado arrastrándose, gritando y rapeando. ¿Alguna vez Jay-Z se ha empinado una botella de Rémy Martin y se ha puesto tan pedo que un doctor haya tenido que llevarlo a una pequeña habitación blanca? No. Fetty Wap y sus Remy Boyz, con todo lo que dicen: ¿Alguna vez se han puesto tan pedos en el vestíbulo de un aeropuerto que en los informes de la policía los haya tenido que describir como “con un grado masivo de ebriedad”? No, no y mil veces no. Pero la señora Zhao sí.

Hoy en día los héroes son muy raros y pocas veces nos inspiran las acciones de nuestros semejantes. Pero señora Zhao, quien quiera que sea, no importa que tan cruda esté, por favor, debo decirle que usted es mi heroína. Sus actos son los actos de un ser humano, libre e inquebrantable, que lucha contra la hostilidad corporativa monótona de reglas sobre reglas, contra los agentes sin humor de la maquina de gobierno. ¿Por qué no podemos meter una botella de coñac de 700 ml a un avión? ¿Quién dice que no podemos gritarle a la policía estando ebrios? ¡Salud! ¡Salud por sentirse bien todo el tiempo! ¡Salud por beber tanto coñac que te prohiban salir del país! ¡Salud por usted, señora Zhao!

 

Fuente: VICE

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