Los diferentes niveles de gobierno deben comenzar por reconocer el problema que representa la pobreza y sus consecuencias, como la muerte de niños por hambre, para que los trabajos se focalicen en atender ese problema.
Los gobiernos deben tener el valor de reconocer y asumir responsablemente lo que acontece en el país y en San Luis Potosí, donde desde hace años se registran defunciones por hambre”.
Así lo consideró el delegado de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL) doctor Fidencio Lázaro Hernández, quien dijo que durante mucho tiempo se han callado cosas que suceden en el país y en el estado, pero actualmente ese problema se estructurar y alinea con los recursos de las diferentes dependencias de gobierno, del estado, municipios y federación, con un solo objetivo que es abatir los lamentables índices de pobreza y muertes de niños por hambre que según la Secretaría de Salud suman 10 al año en San Luis Potosí.
El delegado de la Sedesol dijo que “una apuesta seria es hacer la motivación ciudadana y que la gente participe con el gobierno para juntos atacar y salir de ese problema, y estrechar esa brecha de desigualdad social entre gente pudiente y adinerada, y gente que no tiene los medios ni para alimentarse”.
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