Si Miami no logra que su mejor jugador anote más puntos en el Juego 4 de Las Finales esta noche, podría comenzar a despedirse del trofeo Larry O’Brien
CIUDAD DE MÉXICO (Jueves 13 de junio).- La razón por la que el Heat de Miami aún es favorito en Las Finales es LeBron James. Luego de recibir una dura derrota en el Juego 2, los Spurs ganaron el tercer desafío, primero de tres en su duela, y con ventaja de 2-1 se preparan para el cuarto cotejo hoy, en el que podría decidirse el rumbo de la serie.
Ante el panorama, extraña que Miami siga consintiendo que James mantenga su mentalidad de pasador. LeBron anotó dos puntos en el primer cuarto y al final del tercer periodo, cuando los Spurs habían tomado 21 de ventaja, el cuatro veces Jugador Más Valioso de la NBA estaba en apenas seis tantos.
Dado el historial de descalabros de San Antonio en minutos, la actitud de James al conseguir nueve unidades seguidas al final del tercer rollo anticipaba un desenlace complicado para los Spurs si el 6 del Heat continuaba así. LeBron inició su racha con un triple, nada menos que su primer enceste del juego fuera de la pintura.
El nativo de Akron, Ohio, tiene un historial de grandes cuartos periodos en playoff s. Por ello, a pesar de estar arriba 78-63 tras 36 minutos de juego, los Spurs tenían que arreciar su dominio y no relajarse. Los texanos hicieron precisamente eso: Gary Neal anotó dos triples consecutivos y Danny Green remató al Heat, que dio por perdido el juego a cinco minutos del final.
Ni Tim Duncan ni Tony Parker necesitaron estar en la duela, los Spurs anotaron 16 triples (seis en el cuarto periodo), rompieron la marca de Las Finales y esa fue la razón de su victoria.
Para James parece un desafío similar al que enfrentaba contra los Celtics de Boston hasta la campaña 2010-2011. Los de verde lo habían derrotado dos de tres veces en postemporada cuando estaba en Cleveland, y en las Finales del Este de hace un año, los del trébol tenían ventaja de 3-2 con dos juegos para eliminar al Heat, uno de ellos en su duela.
James anotó 45 tantos, repartió cinco asistencias y atrapó 15 rebotes en el crucial Juego 6 para obligar a un séptimo duelo y ganar tiempo para que Miami se recuperara.
La moraleja para el Heat es que sin más puntos de James no va a ganar, por lo que si quiere emparejar la serie este jueves tendrá que sacarle la mentalidad de pasador a James.
Los Spurs saben cómo marcar a LeBron y convertirlo en un tirador, y James tiene que encestar cuando el rival le conceda el disparo. Por eso se espera que el cuatro veces MVP ataque el aro desde el primer minuto hoy.
El instante definitorio de James fue cuando pudo derrotar a sus verdugos, los Celtics, y condenarlos al olvido. En el Juego 4, tendrá que echar abajo a un equipo que nunca ha perdido en Finales y que lo eclipsó en cuatro juegos en 2007. LeBron tiene que ser fundamental en la serie para los suyos, porque Miami no resistirá otro juego como el tercero.
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