Los artesanos de la cantera en la comunidad de Escalerillas en San Luis Potosí han llevado sus invaluables trabajos a diversos rincones del país los cuales perduran en distintos palacios municipales, es decir su labor ha traspasado nuestras fronteras.
El trabajo en la piedra que se transforma en muros que perduran a pesar el tiempo, el color rosa característico ha llegado a decorar las calles y principales edificios en San Luis Potosí; esta tradición se remonta al siglo XIX cuando se erigieron las grandes ciudades de nuestro país. En las calles potosinas aún permanece el trabajo de los artesanos.
Juan José Moreno Bravo artesano de la comunidad indicó que los potosinos han cambiado su predilección por la cantera rosada por otras tonalidades como la naranja, mantequilla o negra, sin embargo, clientes de toda la República prefieren el tradicional color rosa de la piedra.
“Ellos empezaron a hacer trabajos, lo que son los adoquines de las calles de aquí de la ciudad, lo que son algo de fuentes macetas en aquel tiempo, pero en aquel tiempo más lo que hacían era adoquín, el adoquín para las calles, porque era todo hecho nada más a puro martillo y cincel, todo labrado a mano completamente”, aseguró.
Los abuelos iniciadores de este arte inculcaron a sus hijos esta labor, quienes a su vez enseñaron a quienes hoy con herramientas más modernas realizan trabajos más grandes que decoran iglesias, parques y jardines de todo el país.
“Desde mi abuelo, empezó todo esto; luego mi papá siguió con el negocio y ahorita yo soy el que se hace cargo”, aseguró Felipe Neri Moreno quien representa la tercera generación de canteranos.
La mayoría de los talleres donde se trabaja la cantera son de carácter familiar, y sus miembros han desempeñado esta actividad por generaciones. Inicialmente se elaboraban piezas de ornato como fuentes, lápidas, imágenes religiosas y macetas; actualmente también hacen fachadas, columnas, cornisas y pisos.
Nancy Moreno Martínez, gerente de Lajas y Cantera indicó que pobladores de esta comunidad que actualmente radican en la Unión Americana son quienes importan la piedra desde Escalerillas realizando trabajos especiales.
“Hemos hecho trabajos en presidencias en Saltillo en Coahuila, en Piedras Negras Coahuila, en San Miguel de Allende Hotel Rosewood, éste muy grande, que inauguró el presidente de la República, Felipe Calderón, hacemos todo lo que se puedan imaginar en cantera y lo que no también se puede elaborar (…) hasta Houston, Estados Unidos, frontera con Texas, en Eagle Pass para personas de mucho dinero verdad”.
El arte potosino ha llegado a diversas ciudades del país, incluso se ha trabajado en el extranjero donde artesanos de esta comunidad realizan obras privadas en los Estados Unidos.
Los ranchos de Escalerillas, La Maroma y Pozuelos, del ejido Escalerillas, se encuentran, en ese orden, sobre la carretera federal núm. 80 que va de San Luis Potosí a Guadalajara, entre los kilómetros 7 y 15, o por la carretera federal núm. 70 que conduce a Aguascalientes.
Los excelentes artesanos de la cantera enfrentan numerosos riesgos y peligros, que van desde los accidentes durante la extracción del material hasta posibles enfermedades por la inhalación constante del polvo
“Es una manera de mantener a nuestras familias, desde que yo me acuerdo ha sido lo primordial de aquí de toda la gente porque aquí hacemos desde la extracción de la cantera allá en el cerro, el acarreo y la labradura; la manufactura hasta el acabado terminado y de ahí aparte nos metemos hasta la instalación de ir a pegar la cantera a las casa o a donde se necesite”, aseguró Juan José Moreno.
El tipo de cantera determina la forma en que habrá de trabajarse. Por ejemplo, una cantera dura que no tenga guijarros ni poros es recomendable para el labrado de imágenes, ya que si se utiliza una porosa puede suceder que ya casi al final salga un agujero en la cara y deba ser resanada, hecho que va en detrimento de la pieza.
http://planoinformativo.com/nota/id/263023/noticia/labrar-todo-lo-imaginable-e-inimaginable,-el-trabajo-de-cantereros-en-slp.html