Tener una rutina rigurosa de belleza no siempre es la solución para lograr una piel llena de luminosidad y de vida (a veces la genética tampoco). Pero sí hay un elemento clave que puede ayudar a cualquiera y que tienes al alcance de tus manos: el agua. Sí, tomar la cantidad adecuada que necesita tu organismo hará una gran diferencia en el órgano más grande de tu cuerpo. Para saberlo exactamente debes multiplicar tu peso por 35, es decir, si pesas 60 kilos deberás hacer la siguiente ecuación: 35 x 60=2,100. Entonces la cantidad que tienes que tomar es aproximadamente un poco más de dos litros.
Si no estás acostumbrada a tomar mucho agua empieza por hacer un reto de 21 días, cuando hayas terminado te darás cuenta que tomar agua se convirtió en un hábito y estos son algunos de los beneficios que tendrás:
1. Regular lo que comes
Tomar la cantidad de agua que necesitas te ayudará a mejorar el metabolismo y por consiguiente a la digestión.
2. Hidratación
Gracias a que el agua ayuda a reponer los tejidos podrás retrasar los signos de envejecimiento, tu cuerpo estará más hidratado y obviamente tu piel también. Aparte se verá más limpia sobre todo si tienes problemas de acné e imperfecciones.
3. ¿Qué agua tomar?
Parecería que la respuesta correcta es “cualquiera”, sin embargo te recomendamos que tomes un líquido que también sea rico en electrolitos, esas soluciones iónicas que se encargan de que el cuerpo esté correctamente hidratado.
Empieza hoy este reto y después de un par de semanas comenzarás a ver el gran cambio en tu cuerpo. No te vas a arrepentir, te lo aseguramos.