En un siglo en el que los cuentos de hadas ya no hablan de un “y vivieron felices por siempre”, el tema del matrimonio suele ser una materia complicada a la que no muchas parejas se suscriben. Sin embargo, y a pesar de las altas tasas de divorcio, siempre existen los enamorados que creen en el romance, son chapados a la antigua y dirigen su vida hacia un compromiso de lealtad, respeto y compañía eterna.
Aunque nadie experimenta en cabeza ajena, no está mal un poco de orientación a las parejas de enamorados que sí sueñan con el día de dar el gran paso. Para entender más de ese proceso, algunos usuarios en Internet compartieron su experiencia y confesaron 18 verdades que les hubiera encantado saber antes de casarse.
1.
Que todas las pequeñas cosas que te molestan se multiplicarán por 10 tras casarte.
2.
Me gustaría haber sabido cuántos gases se iba a tirar mi futuro marido. No me malinterpreten, es gracioso… solo que nunca termina.
3.
Que no pasa nada por no gustarse siempre el uno al otro. Pero tienes que elegir amarle todos los días, incluso cuando no te gusta demasiado.
4.
Que mi esposo no puede leer la mente. Que tú creas que algo es obvio no significa que lo para la otra persona. Dile lo que necesites que deba saber.
5.
Me gustaría haberme casado con la persona que ya era mi marido, y no con el potencial que vi en él.
6.
No me di cuenta de lo difícil que es tratar con la familia política. He tenido que aprender a comunicarme con una familia que funciona de forma muy diferente a la mía.
7.
Que el matrimonio es pelear por todo y nada al mismo tiempo: no levantaste tu plato, no pusiste más servilletas, no avisaste que se acabó la leche…
8.
Hablar de popó es más habitual de lo que crees
9.
Que no hay que hacer todo juntos siempre, y está bien.
10.
Me gustaría haber conocido los hábitos de gasto de mi marido. Al poco de casarnos descubrí que yo debía ocuparme del presupuesto para que él no despilfarrase el dinero en cosas que no necesitábamos.
11.
Que no pasa nada por irse a la cama enfadados.
12.
Me gustaría haber sabido cuánto más iba a querer a mi marido con el paso de los años. El día de mi boda pensé que mi amor era el mayor que podría sentir. Estaba equivocada.
13.
Que pueden surgir algunos momentos triste tras la boda. Mi marido y yo ya vivíamos juntos antes de casarnos y no tuvimos niños inmediatamente, así que, durante un tiempo, parecía que no había nada que ansiar.
14.
Me gustaría que me hubieran dicho que una boda no hace un matrimonio.
15.
Tienes que conocer las opiniones de tu cónyuge respecto a tener niños y cómo criarlos.
16.
Que un matrimonio no es 50/50; lo único 50/50 es el divorcio. El matrimonio es 100/100.
17.
Que, a veces, sentarse juntos en silencio es lo más gratificante del mundo.
18.
Que nada que merece la pena es fácil.