“Yo hoy no voy a llorar”, fue la respuesta de Emma Coronel, esposa de Joaquín El Chapo Guzmán, al conocer en la corte de Nueva York el veredicto del jurado, que encontró culpable al capo sinaloense en 10 cargos.
Nada hay que lamentar porque nadie ha muerto, agregó la madre de los dos hijos del narcotraficante mexicano, acreedor al menos a una sentencia de cadena perpetua, cuyo anuncio formal se prevé para el próximo 25 de junio.
La reacción de Emma Coronel, de 29 años de edad, fue narrada por la periodista de Univisión Noticias, Blanca Rosa Vilchez, quien estaba sentada a su lado al momento de conocerse la decisión del jurado.
De acuerdo con el relato de Vilchez, Emma Coronel se enteró del veredicto en la segunda fila de la audiencia de la corte de Brooklyn, el mismo sitio en el que siguió el juicio.
Cinco minutos antes de conocerse el veredicto, según Vilchez, un abogado se acercó a Coronel para ofrecerle pañuelos de papel, y ella le dijo que no los necesitaría porque no iba a llorar. Luego le preguntó a la reportera cómo se decía en inglés “culpable” e “inocente”.
En el relato publicado en la página de Univisión Noticias y citando el testimonio de Vilchez, se narra que, antes de salir de la sala, El Chapo se llevó una mano al corazón y después la levantó en señal de despedida de Coronel.
Ese mismo gesto, dijo la reportera, lo hizo Guzmán cuando Coronel entró a la sala y ella le respondió con el pulgar en alto.
Al salir del tribunal, Emma Coronel se rehusó a dar declaraciones.