Jaime Nava
En pastillas para el aliento, nueces, café, chicharrones, tés, frutas, otras bebidas y botanas que consumen los diputados durante las sesiones de Pleno, de comisiones o reuniones, entre octubre y diciembre del año pasado, el Congreso del Estado gastó 154 mil 130 pesos.
Como respuesta a la solicitud de información con número de folio 00015119, el Congreso del Estado proporcionó copia de las facturas e informó los montos totales erogados por alimentos y bebidas desde agosto hasta el siete de enero del año pasado, quedando de la siguiente manera:
Se debe considerar que la actual legislatura entró en funciones a partir del 14 de septiembre del 2018, por lo que los gastos correspondientes a agosto y septiembre de ese año corresponden a la legislatura anterior; por lo tanto, para tener una idea clara de cuánto han costado los alimentos de quienes actualmente se desempeñan como diputados sólo se consideran las cantidades señaladas a partir de octubre.
De manera recurrente, el Congreso del Estado realiza la compra de alimentos con los mismos proveedores o establecimientos. El agua, la compran por paquetes de 24 botellas con una persona física de nombre Gerardo Guevara Gallegos que es distribuidor autorizado de agua Cryspura.
Otro de los establecimientos donde más comida compran los diputados es Costco, ahí, en un solo día, gastaron 89 mil 436 pesos, de los cuales 14 mil 690 corresponden a la compra de 40 bolsas de un kilo 100 gramos cada una de “nueces surtidas” y 12 mil 199 pesos por 75 cajas de un kilo y medio de galletas surtidas.
Hasta la salsa valentina facturaron con cargo al Congreso. El 13 de noviembre del 2018 se pagaron 132 pesos en Mega Soriana por 15 botellas de la salsa picante. Ese mismo día, en una sucursal de Walmart, gastaron mil 20 pesos en pastillas Hall’s.
Para no pasar hambre en las sesiones de Pleno, los legisladores ordenaban sus alimentos a La Fonda de los Recuerdos, que se ubica a la vuelta de sus oficinas en la calle de Ignacio Comonfort y cuyas facturas oscilan entre 500 y dos mil 360 pesos. Durante las sesiones, era común ver a los diputados salir del recinto legislativo para ir a desayunar a un cuarto contiguo donde les instalaban una mesa con gorditas, fruta, bebidas y botanas.
Actualmente, los legisladores continúan ingresando al cuarto contiguo para llenar vasos de unicel con nueces o uvas porque, de acuerdo con empleados del Congreso, los desayunos fueron cancelados.
Con información de: Astrolabio Diario Digital