Por Victoriano Martínez
Al gobernador y a sus cuates cantantes de banda, lo bailado y lo ganado ya nadie se los quita… y lo que los niños dejen de aprender en dos semanas más de inasistencia a la escuela, ya encontrarán la manera de ver cómo lo recuperan.
Fue un cierre del 2021 en el que las autoridades estatal y municipal convocaron a la irresponsabilidad sanitaria, con un inicio del 2022 en el que la realidad los obliga a responder ante las consecuencias de las que no son ajenos. Consecuencias sobre las que, como autoridades, tienen más responsabilidad que cualquiera, así traten de justificarlo.
De acuerdo con las estadísticas de la propia Secretaría de Salud del Estado, la tendencia de contagios de Covid-19 comenzó a la baja durante el mes de diciembre y, a partir del comienzo de las aglomeraciones con el frustrado encendido del árbol navideño más grande de Latinoamérica el día 9, la tendencia comenzó a ascender.
Una tendencia que se mantuvo durante el periodo de ocho días que duró la gira en la que el gobernador Ricardo Gallardo Cardona pareció cumplir su sueño de encabezar un tour de música de banda y dar cuenta de que lo suyo lo suyo está más en los escenarios que en la política, sin contar que en ellos dio muestras de su descuido en las medidas sanitarias.
Tras las presentaciones musicales entre el 13 y el 20 de diciembre la tendencia de casos Covid-19 se mantuvo, como a la expectativa de que transcurriera el periodo de incubación para que se detonara el problema, con una ligera pausa –¿broma?– el 28 de diciembre, Día de los Inocentes, cuando reportaron ¡sólo 4 nuevos casos!
Poco faltó para que ese día le solicitaran a la Organización Mundial de la Salud (OMS) que declarara bandera blanca para San Luis Potosí como estado libre de Covid-19 y al calce de la petición, claro, colocaran el consabido “inocente palomita…”
Para el cierre de año, la historia sembrada desde la Villa Navideña en el Centro Histórico, que alentó los festejos a diestra y siniestra por todos los rumbos de la ciudad y del Estado, comenzó con una advertencia del secretario de Salud, Daniel Acosta Díaz de León, sobre un nuevo brote “si la población no colabora”.
Cifras de los últimos 4 días: 193 casos el día 30, 195 el día 31, 256 el día primero, 318 el día dos… así los números que ahora hacen reaccionar a la autoridad, a pesar de que la primera advertencia de Acosta Días de León se dio desde hace una semana, y de último –muy último momento– la SEGE y el Ayuntamiento capitalino suspenden el regreso a clases.
Gallardo Cardona anunció el tour de música de banda desde el mismo día que tomó protesta como gobernador y por semanas fue creando la expectativa para que la gente se preparara para aglomerarse.
Ahora que se trata de frenar el nuevo brote, a pesar de los indicadores fueron notados desde hace más de una semana, el aviso de suspensión del regreso a clases presenciales lo dio la SEGE a través de Facebook a las 20:36 horas de este domingo, es decir, menos de ocho horas antes del inicio de las clases.
El Ayuntamiento envió a los medios de comunicación un boletín con relación a la suspensión en sus planteles educativos a las 22:43 horas de este domingo. Los niños ya llevaban varias horas dormidos para madrugar y estar listos para irse a la escuela.
A las 20:47 horas de este domingo, el propio Gallardo Cardona hizo una transmisión vía Facebook para confirmar la suspensión del regreso a clases presenciales y repetir con insistencia que “no se trata de riesgo es un tema de precaución” y pretender asegurar que todo es producto de los festejos del 31 de diciembre.
¿Así o más irresponsables?, alguien preguntará. No faltó quien hiciera la siguiente recomendación. “abran los ojos por favor y deberían de demandar a este sr Galindo y al gobernador por haberlos expuesto a esos contagió por sus dichosas posadas por sus eventos masivos y por el ejemplo q dan ellos al no usar las medidas”.
Si el fracaso en el encendido del árbol pudo ser presagio de la conversión del Festival de Invierno en un Festival Covid, la noche de este domingo el gigantesco cono invertido se volvió a mostrar como pino de mal agüero: elementos de seguridad desalojaron la Plaza de los Fundadores porque se comenzó a torcer por los vientos y tratan de evitar algún incidente mayor.
Por segunda ocasión, la irresponsabilidad decembrina comienza a cobrar factura Covid en un inicio de año, aunque con una diferencia: la actitud irresponsable en esta ocasión no sólo fue por parte de la población, sino que la encabezaron las autoridades estatal y municipal… y la alentaron.
Astrolabio
https://www.astrolabio.com.mx/del-festival-de-invierno-al-festival-covid/
