El ex policía federal ministerial Francisco Cañedo Zavaleta se convirtió ayer en el primer testigo en el juicio en Nueva York contra Genaro García Luna (GGL) en asegurar haber visto al ex titular de la Secretaría de Seguridad Pública en compañía de narcotraficantes.
Cañedo afirmó que el 19 de octubre de 2008 se encontraba de descanso y transitaba por la carretera a Cuautla, en dirección de Cuernavaca-Tepoztlán (Morelos), cuando vio dos camionetas Suburban que le parecieron sospechosas.
El testigo apuntó que decidió bajar la velocidad para ver de qué se trataba y entonces se percató de que en el lugar estaba García Luna acompañado de Arturo Beltrán Leyva y Édgar Valdez “La Barbie”.
Cañedo agrega que se estacionó cerca y levantó el capó de su auto, fingiendo que revisaba algo, mientras vigilaba la situación. Sin embargo, García Luna y sus acompañantes se percataron de ser observados y se marcharon.
El ex policía federal afirma que escribió un documento como denuncia y fue a presentarlo ante el Congreso de la Nación en 2008. Se reunió con la legisladora Layda Sansores y en la computadora de ella escribió una carta, que firmó con el nombre de uno de sus compañeros —Óscar Granados Salero—, la única persona a la que había contado lo que vio. Por recomendación de Sansores, entregaron el documento a la revista “Proceso”. La defensa no cuestionó el por qué firmó con otro nombre.
La defensa mantiene estrategia
La Fiscalía intenta demostrar que entre 2001 y 2012 Genaro García Luna recibió sobornos millonarios del cártel de Sinaloa a cambio de información y protección.
Por su parte, los abogados del exsecretario de Seguridad Pública han armado su defensa hasta el momento con el argumento de que no hay pruebas físicas contra su cliente y de que los testimonios de los narcotraficantes no son creíbles porque son delincuentes y si han testificado ha sido con el fin de lograr una reducción de sus sentencias.
DEA sabía de nexo entre GGL y cártel
En el juicio contra García Luna destacó ayer el testimonio de Miguel Madrigal, agente de la Agencia Antinarcóticos de Estados Unidos (DEA), quien señaló que dicha agencia sabía de los nexos del funcionario público con el cártel de Sinaloa, desde 2010.
Madrigal es agente especial de la DEA en Texas y estuvo más de 7 años en México coordinándose con autoridades mexicanas, entre ellas la Secretaría de Seguridad Pública cuando fue dirigida por García Luna.
Madrigal afirma que se reunió en 2010 con Sergio Villarreal Barragán, alias “El Grande” —quien testificó la semana pasada—, tras su detención.
Madrigal recordó que en aquella reunión “El Grande” habló de los “negocios” de García Luna cuando era policía estatal. También dijo haber visto un video donde identificó la camioneta que pertenecía al entonces comandante de la Policía Federal, Édgar Bayardo, estacionado frente a la casa de Jesús “El rey” Zambada.
Sheinbaum reta a panistas a pronunciarse sobre el juicio
La jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, invitó al PAN a hablar sobre el juicio de García Luna, tras las recientes críticas que emitió el partido político por la información que emitió el Metro de que el crimen organizado está detrás del robo del cable.
“¿No les parece un poco extraño que no hablen de García Luna? Imagínense, el secretario de Seguridad Pública de Calderón, el sexenio de mayor violencia, donde se hizo una apología de la guerra. Ese flamante secretario que presumían en todos lados, un juicio donde se está conociendo que recibía dinero del narco, que cerraban un día el Aeropuerto Internacional de vigilancia para que entrara y saliera todo lo que quisieran, de los vínculos con uno de los cárteles, ¿por qué no hablan de eso?”.
“Si decimos una cosa o si decimos lo contrario, también nos van a criticar, ¿por qué no explican el problema de la corrupción inmobiliaria?”, remató.
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