Mario Delgado, presidente nacional de Morena, aseguró que la marcha por la defensa del Instituto Nacional Electoral (INE) es una farsa, pues los personajes que la encabezan y la convocaron, en realidad quieren regresar a “un pasado corrupto, donde podían cometer fraudes electorales, manipular el voto para favorecer sus intereses y, sobre todo, en el que podían saquear a nuestro país”.
“Este movimiento, esta protesta tiene como pantalla lo del Plan B de la Reforma Electoral, pero lo cierto es que, no es una marcha la ciudadanía, es una manifestación de la derecha en contra de la transformación que se está viviendo a nivel nacional, en 22 estados y en un sinfín de municipios. Ese es el fondo, lo demás es la excusa. Gritan ‘el INE no se toca’ pero en realidad piensan ‘García Luna y Felipe Calderón no se tocan’, ‘la corrupción no se toca’, ‘el influyentísimo no se toca’”, apuntó.
Además, Mario Delgado señaló que el gran error de la oposición es subestimar a los mexicanos, y creer que no tienen criterio, que no están informados ni politizados y que no tienen la madurez política suficiente para darse cuenta de su hipocresía. Lo cual, agregó, únicamente refleja su clasismo porque “el pueblo es más capaz que muchos del PRIAN”.
“Se creen dueños de la democracia en este país, se resisten al cambio, a vivir en una auténtica democracia. Quieren mantener vigentes las prácticas del antiguo régimen y seguir manipulando a las autoridades electorales”, remarcó.
El presidente de Morena comentó que todos los que salieron a marchar están en su derecho de manifestarse; sin embargó, expuso que es mejor hacerlo sin simulaciones, sin aparentar ser ciudadanos independientes, progresistas y liberales, cuando en verdad son líderes de los partidos de oposición.
“Este gobierno ha demostrado una y otra vez que la libertad de expresión y manifestación son principios base de esta transformación. Lo que no se vale es que simulen marchar por la democracia, al tiempo que la pisotean. No podemos permitirnos regresar al México de antes cuando el daño que le hicieron al país los gobiernos neoliberales fue gravísimo”, concluyó.
El Financiero