Durante el festejo del Día del Padre, el pasado domingo 18 de junio, y teniendo como testigo a su hijo de 9 años, Cleydy Karina mató de una puñalada a Jesé cuando discutían por supuestas infidelidades. Ambos estaban severamente alcoholizados y perdieron el control de todo lo que estaba pasando.
Minutos antes de la medianoche del domingo, una vecina llamó a la policía porque escuchó los gritos y el llanto de un niño que le pedía a su papá que no se muriera. Esto ocurrió en el edificio de departamentos que se ubica entre las calles de Panitzin y Tlacopan, de la colonia Santa Isabel Tola, en la alcaldía Gustavo A. Madero.
Cuando los policías llegaron al lugar del homicidio, encontraron al hombre ensangrentado e inconsciente en la cocina, a su lado estaba el pequeño, quien culpó a su mamá de haberlo asesinado con un cuchillo.
¡No estuvo nada padre! Los uniformados detuvieron a la probable responsable del asesinato cuando intentaba huir en compañía de dos de sus hijos. Al ser arrestada, Cleydy Karina declaró que estaban bebiendo porque era el Día del Padre en la piscina que tienen en su casa, pero Jesé empezó a agredirla y para defenderse fue a la cocina, lugar en donde tomó un cuchillo y se lo enterró.
Fuentes policiales informaron que la mujer es de nacionalidad peruana y que junto al occiso se dedicaban a la venta de ropa americana.
Cabe decir que una vecina describió a Cleydy Karina como una persona conflictiva y que Jesé iba al edificio solo a visitar a sus hijos. Aseguró que la pareja peleaba constantemente.
El día del padre no se manchó de sangre nada más en la Ciudad de M,éxico y es que en Nuevo Laredo, Tamaulipas, las cosas no pintaron del color de la paz.
Ese mismo día fueron encontrados los cadáveres de tes jóvenes en la Privada Arteaga, de Nuevo Laredo, Tamaulipas. En el lugar se encontraron latas de cerveza y una botella de tequila, los hombres estaban sentados y recargados en una mesa metálica.
Aunque no presentaban huellas de violencia, se cree que no murieron por congestión alcohólica, sino que fueron asesinados en otro sitio y montados ahí.
El Gráfico