Estos fenómenos nos recuerdan nuestra pequeña pero significativa posición en el cosmos y fomentan la curiosidad y el asombro
En diciembre de 2023, el cielo nocturno nos reserva un espectáculo de luces y alineaciones astronómicas que prometen cautivar tanto a aficionados como a expertos en astronomía. Desde el baile de la Luna con estrellas y planetas hasta lluvias de meteoros y fenómenos solares. Este mes promete estar lleno de eventos que nos invitan a mirar hacia arriba y contemplar las maravillas del cosmos, recordándonos nuestra pequeña pero significativa presencia en este vasto universo.
Disfrutar de los eventos astronómicos es importante porque nos conecta con la vastedad y belleza del universo. Estos fenómenos nos recuerdan nuestra pequeña pero significativa posición en el cosmos y fomentan la curiosidad y el asombro, aspectos fundamentales para el avance científico y cultural. Además, observar el cielo estelar puede ser una experiencia compartida que fomenta un sentido de comunidad y admiración por la naturaleza. Estos momentos son oportunidades para educar y despertar interés por el cosmos.
¿Qué pasará en diciembre en el cielo?
La madrugada del 3 al 4 de diciembre nos presenta un encantador encuentro celestial: la Luna menguante y la estrella Regulus. Este dúo se levantará majestuosamente por el horizonte este-noreste, con Regulus posicionándose sutilmente a la derecha de la Luna. A medida que avanza la noche, esta configuración irá cambiando. Un hecho notable ocurre el 4 de diciembre por la tarde: la Luna alcanzará su apogeo, el punto más lejano de su órbita alrededor de la Tierra. Este fenómeno brinda una perspectiva única sobre la relación cambiante entre nuestro planeta y su satélite natural.
El 7 de diciembre, justo al atardecer, viviremos la puesta del sol más temprana del año. Esta fecha también marca el inicio de Hanukkah y nos regala la aparición de Mercurio, adornando el horizonte suroeste. La mañana del 8 de diciembre, el escenario celeste cambia con la aparición de Spica, una brillante estrella que acompaña a la Luna creciente menguante. Esta pareja celestial nos ofrece un espectáculo de cercanía y belleza en las primeras horas del día.
Los planetas bailará en la bóveda celeste
El 9 de diciembre, Venus, el luminoso planeta del amor, se alinea con la Luna, creando una escena de equilibrio y armonía en el cielo del amanecer. La noche del 12 de diciembre trae consigo la Luna nueva, un momento de oscuridad que precede a la renovación lunar. Entre la noche del 13 y la madrugada del 14 de diciembre, el cielo se engalana con la lluvia de meteoros de las Gemínidas. Este evento es uno de los más esperados del año para los entusiastas de las estrellas fugaces. El 16 de diciembre la Luna estará en su perigeo, acercándose más a la Tierra, y el 17 de diciembre nos regalará una cercana alineación con Saturno.
El 21 de diciembre nos recibe con el solsticio de invierno, un día de especial significado cultural y astronómico, seguido por la conjunción inferior de Mercurio el 22 de diciembre, un cambio en la visibilidad de este veloz planeta. Finalmente, las noches del 23 al 24 de diciembre nos presentan la cercanía entre la Luna gibosa creciente y el cúmulo estelar de las Pléyades, ofreciendo un espectáculo digno de ser observado con binoculares.
El Heraldo de México.