Este viernes se conmemora el Día Mundial del Agua, una fecha que llega en un momento de incertidumbre para México debido al déficit del líquido en más de la mitad del territorio nacional.
Aunque México cuenta con una ubicación geográfica privilegiada, factores como la disminución de las lluvias por el cambio climático, el crecimiento demográfico y una mala gestión de las autoridades, han provocado que apenas el 52% de la población urbana cuente con suministro constante de agua potable, según datos del Inegi.
Incluso, en estados con fuerte infraestructura hidráulica como Nuevo León, el abasto regular ya no llega ni al 31 por ciento. O el caso de Guerrero que, pese a su importante disponibilidad acuífera, solo una cuarta parte de los habitantes tienen acceso a la red de suministro.
Además, la Conagua indicó en su informe más reciente sobre la situación en las presas que 119 de las 210 registran menos de la mitad de su capacidad de almacenamiento, debido a que el 2023 fue el año más seco de los últimos 80 años.
El Dr. Jorge Arriaga, coordinador de la Red del Agua UNAM, señaló que la crisis actual a nivel nacional depende más de la falta de mantenimiento y desarrollo de infraestructura, así como de la adaptación de la sociedad para enfrentarla, que por la carencia del recurso natural.
Por su parte, la Dra. Delia Montero, coordinadora de la red del agua de la UAM, indicó la necesidad de implementar campañas para crear sociedades hidrointeligentes que tengan un uso racional del agua en el hogar y que presionen a las autoridades para implementar políticas públicas sostenibles.
La temporada de estiaje concluye en el mes de julio, cuando el país entra en una época de transición con la temporada de lluvias y ciclones tropicales, siendo los huracanes aliados para México en esta situación.