Joaquín “El Chapo” Guzmán no podrá mantener comunicación personal con sus hijas gemelas ni comunicarse telefónicamente con su esposa, Emma Coronel, en la prisión de máxima seguridad en Florence, Colorado. Esta decisión se tomó luego de que el juez Brian Cogan, encargado de su caso, rechazara su solicitud para otorgarle ese privilegio, según informaron medios locales.
Después de su condena, el Buró de Prisiones asumió la responsabilidad exclusiva de las condiciones en las que se encuentra recluido, y el tribunal carece de la autoridad para modificar estas condiciones. Por lo tanto, la solicitud de Guzmán fue denegada sin prejuicio para que pueda buscar la modificación de sus condiciones de confinamiento directamente con el Buró de Prisiones, según indicó el juez.
En una carta compartida por el medio Milenio, Joaquín “El Chapo” Guzmán había reiterado su petición para que se le permitieran visitas personales de su esposa, Emma Coronel, y sus hijas, las cuales solo podrían realizarse durante las vacaciones, ya que sus hijas están estudiando en México.
Guzmán, actualmente cumpliendo cadena perpetua por delitos relacionados con narcotráfico, crimen organizado y homicidio, expresó su descontento por las Medidas Administrativas Especiales (SAM, por sus siglas en inglés) impuestas por el Buró de Prisiones después de su condena. Afirmó que estas medidas han deteriorado su salud física y mental debido al aislamiento al que está sometido desde su extradición desde México en 2017.