La intensa ola de calor que azota a San Luis Potosí está cobrando un precio devastador en la vida silvestre local. En la Reserva de la Biosfera Sierra del Abra Tanchipa, se han encontrado decenas de aves muertas, víctimas de las altas temperaturas y la escasez de agua. Especies como los cotorros cabeza de viejo, las cotorras tamaulipecas, los loros cabeza amarilla y los loros de cachetes amarillos yacen sin vida en el suelo, un sombrío testimonio de los estragos del calor extremo.
Erick Rubén Rodríguez Ruíz, de la Comisión de Parques y Biodiversidad de Tamaulipas, ha revelado que los ejemplares están sucumbiendo a golpes de calor y deshidratación, agravados por los incendios forestales que actualmente afectan la región. Las altas temperaturas, que superan los 50 grados centígrados, han llevado a las aves a buscar desesperadamente fuentes de agua, incluso acercándose a áreas urbanas en busca de alivio.
Ante esta emergencia, se hace un llamado urgente a las autoridades para fortalecer las medidas de protección y conservación en la región. La instalación de bebederos y la prevención de incendios forestales son acciones prioritarias que deben ser implementadas de inmediato para proteger la vida silvestre local.
En medio de esta tragedia, organizaciones locales como Selva Teenek Ecopark han expresado su preocupación y han tomado medidas para rescatar y rehabilitar a las aves afectadas. Sin embargo, se necesita la colaboración de toda la comunidad para enfrentar esta crisis y proteger la valiosa biodiversidad de San Luis Potosí en estos tiempos de emergencia climática.