En un incidente inusual y polémico, decenas de globos con forma de pene fueron liberados cerca de la corte de Nueva York, donde se está llevando a cabo el juicio contra el expresidente Donald Trump. Los globos, de aproximadamente un metro de largo y color rosado, llevaban impresas las caras de figuras clave del juicio, como el juez Juan Marchand y el fiscal de Manhattan, Alvin Bragg.
Detalles del Incidente
Un partidario de Trump fue el responsable de liberar los globos desde una furgoneta alrededor de la una de la tarde, lo cual atrajo rápidamente la atención de la prensa y se viralizó en redes sociales. Un conductor grabó el momento exacto en que los globos fueron liberados y comenzaron a flotar por las calles de Nueva York.
Además de los rostros de Marchand y Bragg, los globos también llevaban la imagen del fiscal especial Jack Smith, encargado del proceso contra Trump por el asalto al Capitolio en 2021. La policía no confirmó el número exacto de globos, pero los testigos aseguraron que eran al menos 100.
Reacciones y Contexto
Inicialmente, algunos partidarios de Trump interpretaron el incidente como un ataque. Sin embargo, pronto reconocieron las caras en los globos y comprendieron la intención detrás de la protesta.
Trump enfrenta 34 cargos graves por falsificación de registros comerciales, relacionados con denuncias de encuentros sexuales extramatrimoniales durante su campaña de 2016. Este incidente con los globos subraya la tensión y el interés mediático que rodea su juicio.
En redes sociales, usuarios criticaron la protesta, señalando la hipocresía de los republicanos conservadores que participaron en ella:
- “Qué vulgaridad.”
- “Y esos son los ‘conservadores’ y ‘moralistas’… Bah, por eso no creo en ninguno de ellos.”
- “Esa es la típica protesta grotesca de los republicanos. ¡Cuándo no!”
- “Los republicanos, defensores de la moral.”
- “Lo peor de todo es que se hacen llamar ‘conservadores’ y de ‘valores cristianos’.”
Este curioso incidente resalta la alta carga emotiva y la polarización en torno al juicio de Trump, mientras el proceso legal continúa su curso en Nueva York.
