El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, negó este miércoles en su conferencia matutina la veracidad de los reportes que indicaban que una familia de seis personas fue asesinada el lunes pasado en el municipio de Pantelhó, Chiapas. López Obrador afirmó que esta información fue difundida con el objetivo de infundir miedo en la población en el contexto de las próximas elecciones presidenciales.
Desde Palacio Nacional, el mandatario señaló que las noticias sobre la supuesta masacre eran falsas y tenían como fin desestabilizar a la sociedad. “Ayer, todo el día, duro y dale, duro y dale con unos asesinados en Chiapas. Pues resulta que no hubo asesinados ayer en Chiapas, esos asesinados en Pantelhó, pero lo mismo, para meterle miedo a la gente”, declaró. Añadió que las mentiras son “reaccionarias, anticristianas y antirreligiosas”, y subrayó la importancia de no mentir, no robar y no traicionar al pueblo, independientemente de las diferencias políticas.
Los medios de comunicación habían informado que el lunes 20 de mayo, una familia fue asesinada a balazos en su domicilio en Pantelhó, responsabilizando del ataque a miembros del grupo de autodefensa El Machete. En la conferencia de prensa del martes, periodistas intentaron preguntar a López Obrador sobre los hechos en Chiapas, pero el presidente no respondió.
En la conferencia de hoy, López Obrador criticó a los medios de comunicación, acusándolos de ser “voceros” de las élites que se oponen a su gobierno. Reiteró que la difusión de noticias falsas es una estrategia utilizada por sus adversarios para sembrar el miedo entre la población.
