Una asombrosa criatura de las profundidades marinas fue descubierta en la costa de Oregón, dejando atónitos a los visitantes de Cannon Beach este mes. El cuerpo de un pez negro de medianoche yacía en las arenas blancas, revelando un espécimen poco común de la fauna marina.
El Seaside Aquarium confirmó que se trataba de un rape, una especie que habita en completa oscuridad a profundidades de entre 60 y 90 metros bajo la superficie del océano. Estos peces son conocidos por su aspecto inquietante, con ojos completamente negros ubicados en los lados de su cabeza plana.
Sin embargo, lo más sorprendente de este hallazgo es una protuberancia bioluminiscente que sobresale de su cara. Esta antena luminosa, utilizada para atraer y cazar presas en la oscuridad abisal, convierte al rape en una de las criaturas más enigmáticas y fascinantes de los océanos.
La punta de esta protuberancia brilla gracias a bacterias simbióticas, actuando como una caña de pescar para atraer a la presa hacia su boca llena de dientes afilados. Curiosamente, este tentáculo solo aparece en las hembras, que son capaces de succionar presas del tamaño de su propio cuerpo.
“En las profundidades, la comida puede ser muy escasa, por lo que los peces fútbol no son quisquillosos con su alimentación. Comen cualquier cosa que les quepa en la boca. Sólo las hembras cazan activamente, ya que los machos en realidad se parecen más a parásitos”, afirmó el Seaside Aquarium.
Los machos, 10 veces más pequeños que las hembras, buscan una pareja que les ayude a sobrevivir. A cambio, proporcionan a las hembras una fuente constante de esperma, obteniendo todos sus nutrientes de ellas. Aún se desconoce cómo encuentran los machos a las hembras en la oscuridad total.
Este avistamiento único nos ofrece un vistazo a una de las criaturas más misteriosas y fascinantes de las profundidades marinas, que pocas veces se ve fuera de su hábitat natural.
