El 7 de junio de 1999, la Ciudad de México comenzó como cualquier otro día, sin anticipar el trágico evento que dejaría al país en estado de shock: el asesinato de Paco Stanley, un querido conductor de televisión.
Paco Stanley, quien inició su carrera en la radio en XEX participando en noticieros y programas como “Sonrisas y Sorpresas” (1988-1991), se mudó a la televisión donde se ganó el cariño de los mexicanos con programas como ¡Ándale!, Llévatelo y ¡Pácatelas!, junto a figuras como Mario Bezares y Benito Castro. El día de su muerte, Stanley había grabado su programa “Una tras otra”, y tras la grabación, fue a comer al restaurante ‘El Charco de las Ranas’. Al salir y subirse a su camioneta, un hombre le disparó con una ametralladora, matándolo al instante.
La noticia del asesinato, ocurrido a las 12:08 horas, se difundió rápidamente, paralizando a México. Las dos principales televisoras del país interrumpieron su programación para cubrir el evento, y miles de personas se reunieron en las calles de la Ciudad de México para rendir homenaje a Stanley, cuya muerte conmocionó tanto al espectáculo como al público en general.
El asesinato de Paco Stanley rápidamente generó especulaciones. Inicialmente, se pensó que era un caso de violencia urbana, pero las investigaciones sugirieron algo más oscuro: una posible venganza del narcotráfico. Se encontraron rastros de cocaína en su sangre y en sus ropas, lo que llevó a las autoridades a investigar a Mario Bezares y la edecán Paola Durante como posibles cómplices. Ambos fueron encarcelados pero liberados posteriormente por falta de pruebas.
A pesar de las investigaciones, la verdad sobre su asesinato sigue siendo un misterio. Aunque se identificó a sicarios de los Arellano Félix como los responsables, el motivo exacto de su muerte no se ha esclarecido. Paco Stanley sigue siendo recordado como una de las figuras más queridas y carismáticas de la televisión mexicana, cuyo legado perdura en la memoria colectiva del país.
