La actitud de evasión del presidente Andrés Manuel López Obrador frente a las preguntas sobre diversos temas relacionados con el PRI ha generado atención. En una conferencia mañanera en Palacio Nacional, se le cuestionó sobre la posibilidad de reelección de Alejandro Moreno “Alito” como dirigente nacional del PRI, así como sobre otros temas sensibles como la supuesta renuncia del partido al neoliberalismo y los señalamientos relacionados con el asesinato de Luis Donaldo Colosio.
López Obrador optó por evitar dar respuestas directas y concluyó la sesión con la frase “Vámonos a desayunar”, cerrando así la conferencia sin abordar las preguntas planteadas por los periodistas.
Este tipo de respuestas evasivas pueden interpretarse como estrategia para no entrar en temas que podrían generar controversia o que no están dentro de la agenda del gobierno en ese momento.
