Un trágico incendio en una escuela de Kenia dejó un saldo de al menos 17 niños muertos, según informó la policía este viernes. El siniestro ocurrió en el dormitorio de la Academia Hillside Endarasha, ubicada en el condado de Nyeri, alrededor de la medianoche. El fuego se extendió rápidamente por la habitación donde dormían más de 150 menores, reveló la vocera policial, Resila Onyango.
“Se han registrado 17 fallecimientos y otras personas han sido trasladadas al hospital con heridas graves”, declaró Onyango. Los cuerpos recuperados estaban tan severamente calcinados que son irreconocibles, añadió la portavoz.
Además de las 17 víctimas fatales, 16 personas resultaron gravemente heridas y fueron llevadas a un hospital cercano. Se estima que podrían encontrarse más cuerpos a medida que avanzan las labores de rescate. La causa del incendio aún es desconocida, y se ha abierto una investigación al respecto.
La Comisión Nacional de Género e Igualdad de Kenia informó que la residencia afectada estaba “sobrecargada”, lo que compromete las normas de seguridad. La escuela, que atiende a unos 800 estudiantes de entre cinco y 12 años, no cumplía con los requisitos de seguridad adecuados, según los informes iniciales. La mayoría de las víctimas tenía alrededor de nueve años.
El presidente de Kenia, William Ruto, expresó su pesar por la tragedia. “Nuestros pensamientos están con las familias de los niños que perdieron sus vidas en este devastador incendio”, escribió en la red social X. Ruto también ordenó una investigación exhaustiva para esclarecer el incidente y aseguró que los responsables serán llevados ante la justicia.
La escuela se encuentra a unos 170 kilómetros al norte de Nairobi, la capital del país. La Cruz Roja de Kenia está en el lugar brindando apoyo psicosocial a estudiantes, docentes y familias afectadas. Cerca de 100 padres se congregaron frente a la escuela en busca de información sobre sus hijos. En los últimos años, Kenia y otras naciones de África Oriental han enfrentado varios incendios en escuelas, con trágicas pérdidas de vidas, como el incidente de 2016 en Nairobi.
