La inseguridad en ciertas zonas de la zona metropolitana de San Luis Potosí ha llevado a que repartidores de aplicaciones de comida opten por evitar algunas colonias. Según varios trabajadores de plataformas digitales, la delincuencia en áreas como la Unidad Habitacional Pavón en Soledad de Graciano Sánchez, y en las colonias Arbolitos y Progreso al sur de la capital, los ha obligado a cancelar entregas para resguardar su seguridad.
El temor se extiende a colonias inesperadas, como Las Lomas, donde también han sido víctimas de robos. Esta situación se intensificó tras el asesinato de Dariana Posadas, una repartidora que perdió la vida en septiembre, lo que aumentó las precauciones de sus compañeros. Según Jorge, un repartidor conocido como “El Lobo Rojo,” los peligros incluyen robo de motos, celulares y asaltos constantes, además de enfrentamientos con taxistas concesionados, quienes, asegura, también han sido una amenaza en eventos como la pasada Feria Nacional Potosina (Fenapo).
A pesar de los riesgos, muchos jóvenes potosinos eligen este trabajo ante la falta de empleos bien remunerados, aunque esto implique la posibilidad de exponerse a situaciones de peligro cada vez que aceptan un pedido.
