Los locales abandonados en la avenida Muñoz, cerca del bulevar del Río Santiago, se han convertido en una constante preocupación para los vecinos de la zona, como los del fraccionamiento Villa Campestre, debido a los incendios que se han registrado en estos inmuebles. En lo que va del año, se han contabilizado al menos seis incendios, en su mayoría atribuidos a personas en situación de calle que ocupan los espacios abandonados, encendiendo fogatas para calentarse o quemar cables para obtener cobre.
A pesar de los esfuerzos del Ayuntamiento capitalino, que ha realizado jornadas de limpieza y retirado a las personas en situación de calle, los individuos regresan constantemente, y el problema persiste. Las autoridades han informado que al tratarse de una propiedad privada, la intervención directa es limitada, aunque se ha considerado investigar la titularidad del inmueble para exigir medidas de seguridad, como la instalación de una malla o barrera.
El temor de los vecinos aumenta ante la posibilidad de que uno de estos incendios se extienda hasta una gasolinera ubicada a pocos metros. Exigen a las autoridades una intervención urgente para evitar una posible tragedia y brindar tranquilidad a la comunidad.