Mark Zuckerberg, director ejecutivo de Meta –compañía matriz de Facebook, Instagram y WhatsApp–, ha manifestado su intención de desempeñar un papel activo en las políticas tecnológicas impulsadas por Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos. Así lo dio a conocer Nick Clegg, presidente de asuntos globales de Meta, quien aseguró que Zuckerberg considera que este es un momento clave para el futuro de la innovación estadounidense.
El CEO de Meta cenó recientemente con Trump en su residencia de Mar-a-Lago, en Palm Beach, Florida. Aunque los detalles específicos de la conversación no fueron revelados, Clegg afirmó que Zuckerberg estaba agradecido por la invitación y resaltó la relevancia de mantener el liderazgo tecnológico de Estados Unidos en un contexto global lleno de incertidumbres.
“Mark está profundamente interesado en contribuir a los debates sobre el papel de la inteligencia artificial y otras innovaciones tecnológicas en el futuro de Estados Unidos. Estos temas serán fundamentales para cualquier administración en los próximos años”, explicó Clegg en una conversación con medios de comunicación.
Rivalidad con Elon Musk y preocupaciones tecnológicas
El interés de Zuckerberg también está relacionado con la creciente influencia de Elon Musk, propietario de X (anteriormente Twitter) y uno de los principales asesores de Trump en temas tecnológicos. Musk, actualmente la persona más rica del mundo, ha destinado importantes recursos para apoyar la campaña de reelección del republicano, lo que podría afectar las operaciones y proyectos de Meta, especialmente en el desarrollo de inteligencia artificial.
Otro punto de preocupación para Zuckerberg es la postura de Trump respecto a TikTok, uno de los principales competidores de Meta. En declaraciones anteriores, Trump indicó que no tiene intención de prohibir la plataforma, lo que podría desafiar aún más la posición de Meta en el mercado.
Críticas a la moderación de contenido
En paralelo, Nick Clegg reconoció problemas persistentes en la moderación de contenido dentro de las plataformas de Meta, calificándolos como un “nivel de error demasiado alto”. “Con frecuencia se elimina contenido inofensivo o se penaliza injustamente a los usuarios. Estamos comprometidos a mejorar la precisión y exactitud en este ámbito”, apuntó.
Meta admitió anteriormente que durante la pandemia de Covid-19 implementó filtros de moderación demasiado restrictivos. Esta política fue objeto de críticas, especialmente después de que Zuckerberg acusara a la administración del demócrata Joe Biden de presionar a la empresa para censurar publicaciones relacionadas con la pandemia.
El acercamiento entre Zuckerberg y Trump, así como la competencia con Musk, podría marcar un nuevo capítulo en la relación entre el gobierno de Estados Unidos y las grandes empresas tecnológicas. Mientras tanto, Meta busca equilibrar su posición en un entorno que enfrenta tanto oportunidades como desafíos sin precedentes.