Detienen al dueño de Sonido Cóndor tras enfrentamiento en evento musical en CDMX

Familiares denuncian abuso de autoridad por parte de la SSC

Arnulfo Aguilar, propietario y líder de la agrupación Sonido Cóndor, fue arrestado junto con otras cinco personas tras un enfrentamiento con elementos de la Secretaría de Seguridad Ciudadana (SSC) de la Ciudad de México. El altercado ocurrió durante un evento musical en la vía pública que, según las autoridades, no contaba con los permisos necesarios.

El conflicto y su desenlace

El evento, planeado para llevarse a cabo en una calle de la capital, fue interrumpido por la SSC bajo el argumento de falta de autorización. Durante el operativo, surgió una riña que dejó como resultado dos policías lesionados. Aguilar y su equipo fueron detenidos en el lugar.

Por su parte, familiares del líder sonidero, incluido su hija, aseguran que el evento sí tenía los permisos requeridos. “Aquí está la autorización”, publicó la hija de Aguilar en redes sociales, acompañando el mensaje con imágenes y videos que, según afirma, muestran un uso excesivo de la fuerza por parte de los agentes.

Alegaciones de abuso de autoridad

En videos difundidos en redes sociales, se observa un supuesto forcejeo entre Aguilar y los policías. Según su familia, el empresario fue golpeado y despojado de su celular mientras intentaba documentar lo sucedido. “Le quitaron el celular donde tenía pruebas del abuso,” señaló su hija.

Testigos también denunciaron que los policías ingresaron sin autorización a una propiedad privada durante el operativo y agredieron a los presentes. “El oficial inventó razones para cancelar el evento, a pesar de que todo estaba en regla,” declararon los organizadores.

Reacciones en redes sociales

El caso ha generado una ola de indignación en redes sociales, donde seguidores de Sonido Cóndor exigen una investigación y justicia. “Queremos que se revisen los videos y se esclarezcan los hechos,” demandaron los simpatizantes, quienes también solicitaron la devolución del celular incautado.

El incidente ha puesto nuevamente en debate la actuación de las fuerzas de seguridad en este tipo de eventos y la regulación de espectáculos en espacios públicos.

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