El hombre guatemalteco arrestado por ser el principal sospechoso de asesinar a una mujer en el Metro de Nueva York el pasado domingo había sido deportado de Estados Unidos en 2018 por ser inmigrante irregular, según informa el New York Post.
El individuo, de 33 años, aún no ha sido formalmente acusado, pero las autoridades lo señalan como el único responsable de prenderle fuego a una mujer mientras dormía en un vagón del metro. El hombre permaneció observando mientras la víctima luchaba contra las llamas hasta fallecer.
De acuerdo con fuentes policiales citadas por el medio, el sospechoso regresó a Estados Unidos después de su deportación y pasó un tiempo viviendo en varios albergues municipales en Nueva York. Estos albergues, parte de una extensa red de apoyo en la ciudad, están disponibles para quienes no tienen hogar, en cumplimiento de una ley que asegura techo a todas las personas.
El hombre fue registrado en el albergue de Randall’s Island, que ya está cerrado, y utilizó esa dirección para obtener transporte público gratuito. Este caso surge en un contexto político marcado por la promesa del presidente electo de Estados Unidos, Donald Trump, de llevar a cabo una masiva deportación de inmigrantes ilegales una vez asuma el cargo en enero.
