Durante una entrevista con Yordi Rosado en su canal de YouTube, el expresidente Felipe Calderón Hinojosa aseguró que se han difundido muchas mentiras sobre su gobierno, entre ellas la acusación de que tenía problemas con el alcohol.
Calderón afirmó que llevó una vida disciplinada durante su mandato, con una rutina de ejercicio constante y sin faltar a ningún evento oficial. “Nunca llegué tarde, di más de 3 mil discursos y jamás hubo una incoherencia, sobre todo en esta era de celulares donde todo se graba”, explicó.
El exmandatario también negó haber construido un bar en la residencia oficial de Los Pinos, calificándolo como una de las tantas calumnias en su contra. “Dicen que construí un bar ahí en Los Pinos. Es una méndiga mentira”, expresó. Según Calderón, estos rumores surgieron porque sus críticos no pudieron acusarlo de corrupción o de escándalos personales.
Además, señaló al periodista Federico Arreola como el responsable de haber difundido el rumor sobre su supuesto alcoholismo. Sin embargo, aseguró que Arreola se retractó y lo reconoció públicamente en redes sociales.
Durante la entrevista, Calderón también recordó a dos de sus excolaboradores cercanos, los exsecretarios de Gobernación Juan Camilo Mouriño y Francisco Blake Mora, quienes fallecieron en accidentes aéreos mientras estaban en funciones. Aseguró haber investigado ambos casos y estar convencido de que no fueron ataques del crimen organizado, sino accidentes provocados por errores de los pilotos y condiciones climáticas adversas.
El expresidente reafirmó que, mientras estuvo en el cargo, tuvo que tomar una decisión clave: enfrentar o tolerar al crimen organizado. “Yo decidí combatirlo porque lo que estaba en juego eran las familias mexicanas”, subrayó. Explicó que, al asumir la presidencia, descubrió cómo los grupos criminales estaban tomando el control de pueblos, ciudades y gobiernos locales, lo que describió como “la captura del Estado”.
Calderón también reveló que recibió múltiples amenazas de muerte. Contó que, durante una gira en Tampico, su equipo de seguridad fue advertido de un posible atentado con un lanzamisiles contra su avión. A pesar de esto, decidió continuar con su viaje y, antes de despegar, grabó un video dirigido a su esposa Margarita Zavala y a sus hijos, en el que les pedía recordarlo como alguien que cumplió con su deber.
Finalmente, recordó que, debido a la amenaza en Tampico, su agenda fue modificada y solo realizó dos de los cuatro eventos programados. “Rapidito, como entierro de pobre, y nos regresamos”, relató.
