Líderes de un cártel mexicano aseguraron al diario The New York Times que se están preparando con más armamento, sicarios y tecnología para enfrentar la ofensiva militar que el expresidente Donald Trump ha ordenado en la frontera entre México y Estados Unidos.
De acuerdo con el reporte, los grupos criminales están importando escáneres para detectar drones, contratando personal con experiencia en vigilancia aérea y aumentando el tráfico de armas desde Estados Unidos para protegerse de posibles operativos.
La presión sobre los cárteles se ha intensificado en las últimas semanas, luego de que el gobierno mexicano desplegara 10 mil elementos de la Guardia Nacional para frenar el tráfico de fentanilo y la migración irregular, como parte de las exigencias impuestas por Trump para evitar la aplicación de aranceles del 25% a las exportaciones mexicanas, que entrarían en vigor el próximo 4 de marzo.
“Ahora va la suya”
Los líderes anónimos citados por el Times afirmaron que, por primera vez en años, sienten temor de ser detenidos o asesinados por las autoridades mexicanas, pero advirtieron que ya están preparando su propia estrategia.
“Estamos contratando más gente para vigilar los cielos. Estamos trayendo escáneres para detectar drones, más armas y más personal”, señaló uno de los entrevistados.
Algunos miembros del crimen organizado también revelaron que están vendiendo propiedades y despidiendo a empleados innecesarios para compensar las pérdidas económicas provocadas por la caída en la venta de fentanilo, debido a los operativos y la mayor vigilancia en la frontera.
Cárteles bajo presión
El despliegue militar en la frontera se ha reforzado con la llegada de 3 mil soldados estadounidenses adicionales, enviados por Trump a través del Pentágono, que se suman a las 9 mil tropas ya estacionadas entre Texas, Arizona y California.
El gobernador de Texas, Greg Abbott, también ha enviado más de 4 mil 500 elementos de la Guardia Nacional a la frontera, como parte de su plan para detener la migración.
La demanda nunca acabará
A pesar de las medidas, uno de los líderes criminales entrevistados por el Times dejó claro que el negocio del narcotráfico continuará:
“La demanda nunca se va a acabar. La adicción hace que la demanda no se acabe. No somos terroristas, somos hombres de negocios”, declaró.