Con la intención de saber en qué condiciones están miles de casas de interés social en México, el gobierno federal está realizando un censo en más de 842 mil viviendas. Muchas de estas propiedades fueron abandonadas o llevan años sin recibir pagos, según informó la presidenta Claudia Sheinbaum.
Hasta ahora, se han visitado 47 mil 845 casas en distintos estados del país. El censo ha revelado que el 87% de esas viviendas están ocupadas, mientras que el 13% se encuentran deshabitadas.
La Secretaría del Bienestar es la encargada de este operativo, que se realiza en los 32 estados y en más de mil municipios. Para esta labor, se ha desplegado a mil 632 servidores de la nación que visitan directamente los domicilios para verificar qué sucede con cada inmueble.
El objetivo es determinar si las viviendas están ocupadas por quienes solicitaron el crédito original o si fueron invadidas por otras personas. También se busca saber si los dueños originales simplemente dejaron de pagar o si incluso ya no son los propietarios sin saberlo, ya que en muchos casos hubo juicios que se llevaron a cabo sin su conocimiento en otros estados del país.
Además, el Infonavit ha detectado que 216 mil viviendas ya fueron recuperadas por el instituto, mientras que en 497 mil casos no se tienen registros de pagos desde hace muchos años. Estas casas están siendo evaluadas para decidir qué acciones tomar.
Octavio Romero, titular del Infonavit, explicó que hay al menos 131 mil viviendas involucradas en juicios masivos. En estos casos, participaron abogados, notarios y funcionarios corruptos que iniciaron procesos ilegales de despojo y están siendo investigados.
También se están atendiendo más de 3 mil 400 demandas relacionadas con prácticas irregulares. Estas incluyen ventas múltiples de una misma casa, uso de gestores no autorizados, y la entrega de dinero a constructoras que nunca construyeron las viviendas pactadas.
Romero añadió que en muchos casos los beneficiarios dejaron de pagar porque las casas les quedaban muy lejos, sin servicios básicos, o simplemente no les convenía vivir ahí. Por eso es tan importante el censo: para saber qué hacer con todas estas viviendas que han quedado olvidadas o fuera de control.