Un intento de operativo en el Centro Penitenciario Varonil de Tanivet, Oaxaca, terminó en una seria crisis: un reo escapó, dos internos murieron y cuatro funcionarios fueron detenidos, incluyendo al subdirector del penal.
La mañana del 8 de mayo, la fuga de Amín Gómez Bautista desató una intensa movilización de las autoridades. El gobierno estatal, encabezado por Salomón Jara Cruz, activó operativos de búsqueda y tuvo que aclarar públicamente que los dos fallecimientos registrados no ocurrieron durante el intento de escape, como se llegó a especular.
De acuerdo con la Fiscalía General de Oaxaca, el subdirector del penal y tres custodios están bajo investigación por su posible responsabilidad en la fuga del recluso. Los detenidos ya fueron presentados ante el Ministerio Público, con apoyo de la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana del estado.
Además del despliegue de la Policía Estatal, la Guardia Nacional y drones de vigilancia, el caso generó confusión luego de que circularan versiones no confirmadas sobre la presunta muerte del reo fugado. Sin embargo, autoridades negaron esta versión y aclararon que quien falleció fue otro interno trasladado al hospital tras sufrir un paro cardiaco.
En medio del caos, también se reportó el supuesto suicidio de otro recluso, lo que aumentó la tensión dentro del penal. Como medida preventiva, 17 internos fueron trasladados a otras instalaciones.
La organización de derechos humanos CODIGO-DH exigió una investigación clara y detallada de lo ocurrido. Señalan que el operativo pudo haberse realizado con uso excesivo de la fuerza, sin respetar los derechos humanos. También demandaron que se informe sobre decomisos de objetos prohibidos y se investigue la posible corrupción dentro del penal.
Además, pidieron a la CNDH y a otros organismos que supervisen lo sucedido para prevenir nuevas irregularidades en el sistema penitenciario oaxaqueño.