El hombre pequeño que durante más de 20 años alegró a la Arena México con el nombre de KeMonito ahora se presenta como Don Changuito. Su identidad cambió tras un conflicto sobre los derechos del personaje con el Consejo Mundial de Lucha Libre (CMLL), pero su cariño por el cuadrilátero permanece intacto.
“La Arena México no me provoca rencor”, asegura. Ahí vivió triunfos y tropiezos, aprendió el oficio y halló sustento para su familia. Por eso prefiere dejar que los abogados aclaren quién posee el nombre original y evitar confrontaciones públicas: “Son cosas que pasan; que la ley decida y todo en paz”.
Aun con la disputa, guarda gratitud por la empresa que lo vio crecer. Reconoce que el CMLL le dio un lugar cuando su estatura podía haberle cerrado puertas y le permitió forjar una carrera que hoy lo mantiene vigente en la memoria de los aficionados.
Sobre el nuevo personaje al que el CMLL viste como KeMonito, Don Changuito admite cierta molestia, aunque le desea lo mejor: “Me incomoda que otro compañero aceptara portar el traje, pero cada quien necesita trabajar. Sólo le pido que se cuide; nuestro oficio es delicado y ya se nota que está resentido físicamente”.
El exmascota azul subraya que no guarda animadversión y que su prioridad es seguir ligado al pancracio, ahora con un apodo distinto pero con la misma pasión que lo hizo famoso frente a miles de fanáticos.